No ha sido un 2021 fácil para nadie. Tampoco para el Ayuntamiento de Almendralejo que, como el resto de España, tiene que hacer frente a una pandemia que no terminar de desaparecer. Sin embargo, ha sido un año de recuperación «y creo que, comparándolo en cifras, mucho mejor, por supuesto que el 2020», señala el alcalde José María Ramírez a la hora de hacer balance del ejercicio que mañana termina. 

De hecho, califica de «bueno» el año para Almendralejo, siempre dentro de las complicaciones derivadas de la pandemia de covid-19, destacando la recuperación de las empresas, el turismo, la construcción y en aumento de población, aunque quedan cosas que apuntalar.

A nivel político, Ramírez tiene claro que «estamos en el momento de menor crispación política en muchos años en Almendralejo. Dos no riñen cuando uno no quiere. Lo que veo a nivel nacional, desde luego, no lo vemos aquí», reconoce. Ahí deja claro que en esta nueva etapa en la alcaldía ha tenido claro «no mirar para atrás para sacar trapos sucios, sino intentar hacer cosas para mejorar la ciudad», subraya.

Lo que más le preocupa es la excesiva carga burocrática que tienen que soportar hoy día los ayuntamientos para poner en marcha proyectos. «Era algo que antes no ocurría», recuerda Ramírez. Entre sus objetivos se ha centrado en recuperar recursos humanos para una mejor gestión municipal y pone énfasis en una renovación total del sistema informático municipal que les ha permitido darle una gestión y servicios más rápido a los ciudadanos. 

Con respecto al sector de la construcción, resalta que en 2021 se ha duplicado la solicitud del número de licencias de obras mayores con respecto a ejercicios anteriores. Y algunas licencias, como las expedidas para las plantas fotovoltaicas, han dejado importantes ingresos, además de generar nuevas oportunidades laborales y de formación específica para sus vecinos.

El alcalde socialista tiene además palabras para elogiar la fortaleza del sector de la agricultura, incluso pese a la bajada de precios que han tenido que soportar este año los agricultores en las recolecciones de la uva y la aceituna. 

Sobre el comercio, ensalza la necesidad de seguir atrayendo a vecinos de otros municipios de la comarca que son asiduos a comprar en Almendralejo, mientras que subraya la apuesta que seguirá haciendo el ayuntamiento por la formación, «ya que es una pena que haya muchas empresas aquí que no encuentran personal cualificado y ahí tenemos que focalizar esfuerzos».

Suelo empresarial

Ramírez se detuvo a explicar los detalles de la futura ampliación del polígono industrial y esos casi 50.000 metros cuadrados que en un futuro deben convertirse en suelo empresarial. Ahora se está finalizando el proyecto para urbanizar la zona junto a la estación de la ITV y la idea es que antes del verano comiencen las obras para crearlo.

También habló del Plan General Municipal (PGM) y su retraso continuo en su aprobación. «Lo consideramos importante, pero creemos que no es la clave del futuro. Ahora mismo le damos más importancia al proyecto de la Agenda Urbana que nos marca los objetivos de aquí a 2030 y que son fundamentales para Almendralejo y su crecimiento», precisó.

Objetivos de 2022

Uno de los grandes retos para Almendralejo es corregir sus datos de población. Actualmente, el censo marca que Almendralejo no supera los 34.000 habitantes, pero la realidad es que tiene más de 37.000 personas afiliadas a la Seguridad Social. «Hay mucha población que vive aquí, pero no está censada. Es algo que tenemos que corregir», explica. La idea es contratar a agentes censales, ya que registrar más población podría atraer mucha más inversión a la ciudad. 

La adecuación de la travesía de la carretera que va a Fuente del Maestre, la reforma de la travesía de la carretera de Santa Marta, avances en el enlace sur de la autovía o nuevas viviendas sociales, son otros objetivos que Ramírez quiere hacer realidad a lo largo de 2022.