Susto en el Hospital Materno Infantil de Badajoz. La mañana de este viernes se ha venido abajo el falso techo de una de las salas de espera de la entrada a Ginecología, provocando importantes desperfectos en la estancia y otros departamentos contiguos.
Los cascotes han caído al suelo y han quedado colgando cables y conductos. Afortunadamente, según ha confirmado el Servicio Extremeño de Salud (SES), en ese momento no había nadie en la sala, por lo que no ha habido que lamentar daños personales.
Según han explicado las mismas fuentes, lo que se ha desprendido es un tubo del sistema de refrigeración del hospital, muy pesado, que al soltarse ha roto la escayola del techo. El centro ya ha habilitado otra entrada segura para el servicio de Ginecología. Esta dependencia es en la que esperan las embarazadas y sus familiares cuando acuden al centro por alguna urgencia.
El consejero de Sanidad, José María Vergeles, a preguntas de la prensa en Cáceres, ha asegurado que ya ha pedido a la Gerencia del Área de Salud de Badajoz que se revisen todas las conducciones del sistema de aire acondicionado del hospital como medida de prevención, según recogió Efe. «Esto puede pasar en cualquier sitio, afortunadamente no ha habido daños personales, pero sin duda tenemos que insistir en el mantenimiento preventivo de nuestros edificios», ha dicho el consejero, quien ha reconocido que el centro «tiene ya una edad».
Satse pide el cese "inmediato" de los responsables
Por su parte, el sindicato de enfermería Satse ha exigido, tras lo que considera «un grave incidente», el cese «inmediato» de la dirección de Régimen Económico y Presupuestaria del área de Salud de Badajoz, como «máximos responsables» de la gestión y mantenimiento del centro. En este sentido, ha hecho hincapié en que la sala donde se ha venido abajo el techo es frecuentada «constantemente» por mujeres gestantes, niños y neonatos, además del personal sanitario. «Es un golpe de suerte que no se hayan producido graves daños personales», ha afirmado.
El sindicato ha criticado que si la falta de mantenimiento preventivo en unas instalaciones «tan importantes» son «una muestra de dejadez intolerable», lo es aún más que no se hayan atendido las reiteradas advertencias que Satse ha hecho sobre el «grave deterioro» de las mismas, tras casi 50 años sin que se hayan llevado a cabo reformas. El sindicato recordó que ya se dio traslado del «riesgo» que existe a Salud Laboral e incluso se curso una denuncia ante la Inspección de Trabajo, sin que ello sirviera para que el Área de Salud de Badajoz atendiera sus requerimientos.
El Hospital Materno Infantil, el más antiguo de los tres públicos de Badajoz, está pendiente de una reforma integral. Vergeles anunció en 2020 que el centro hospitalario se iba a remodelar de manera progresiva con una inversión que entonces cifró en 15 millones de euros, que confió en que llegaran de Europa. La intención era realizar las obras antes de que acabara eta legislatura.
