Medio centenar de personas, de todas las edades, (en grupos infantiles, jóvenes y adultos), han participado en la última edición de los Talleres de Teatro Ceres, que llevó hasta Monesterio la organización del 67 Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, en colaboración con el ayuntamiento y la productora extremeña, Estampa Teatro.

 Dirigidos por la autora, directora y actriz, Concha Rodríguez, las sesiones formativas han focalizado el conocimiento de los textos clásicos, a través de la recreación teatral de síndromes, fobias y complejos. Conceptos “claramente complicados, pero muy divertidos”, sostiene Rodríguez. Para ello, en sesiones específicas por tramos de edad, se ha trabajado en aspectos relacionados con la dramaturgia, la improvisación, o los juegos teatrales, con el objetivo de implicar a los habitantes de este municipio en la “pasión por las artes escénicas”. La elección de temática y textos, está directamente relacionada con la conexión de esta acción, con la celebración del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida; entidad patrocinadora de este evento, que se celebra en 40 localidades extremeñas, y que con esta actividad, imprime y prioriza en la formación teatral.

Grupo de alumnas atentas a las explicaciones de Concha Rodríguez Cedida

 Complejos y psicología

 En el momento en el que nos encontramos, inmersos en una larga pandemia de confinamientos, aislamientos e incertidumbres, “en la que una buena parte de la población necesita ayuda psicológica”, el taller Ceres propone respuestas. La mitología griega, la psicología humana y los castigos de los Dioses, se ven reflejados en los textos y en las propuestas dramatúrgicas que la organización propone a los asistentes. Y es que, según explica Concha Rodríguez, “Todos tenemos los mismos complejos, los mismos síndromes, o las mismas fobias”.

 Los participantes han disfrutado y experimentado nuevas experiencias, --en algunos casos, como primera toma de contacto con las artes escénicas--, en un aprendizaje que va más allá del amor por el teatro, “algo que no se les va a olvidar nunca”, manifiesta Concha Rodríguez, “muy satisfecha”, por la “implicación” de su alumnado.

 El taller se ha desarrollado entre los días 7, al 28 de julio, en las instalaciones del auditorio municipal de la casa de la cultura, con horario flexible, (matinal para niños y jóvenes, y de tarde, para los mayores). Debido a la actual pandemia, la cita se cerró con una representación, a cargo del grupo juvenil, exclusiva para el alumnado y sus familiares.