La Red de Centros Integrales de Desarrollo (CID) de la Diputación de Badajoz ha alojado casi 200 iniciativas empresariales desde la creación en 2014 de estos centros repartidos por toda la provincia, actualmente una veintena en los que, junto a espacios de uso temporal destinados a personas emprendedoras y empresas, también se ofrecen servicios de asesoramiento técnico.
El diputado de Concertación y Participación Territorial de la Diputación de Badajoz, Abel González, presentó ayer un balance sobre el trabajo de esta red. En su intervención, explicó que la Red de CID, 14 edificios más cinco anexos que se llevaron a cabo entre los años 2014 y 2015, se integra en el Área de Concertación y Participación Territorial y que se trata de un «buen proyecto» dirigido a albergar iniciativas empresariales y proyectos de interés comarcal que puedan tener incidencia sobre una localidad concreta y «sobre todo un territorio». Su objetivo es objetivo promover el desarrollo local favoreciendo la creación de empresas, lo que contribuye a la generación de empleo, dinamización económica y a la fijación de la población en el territorio.
Ejemplos
En este sentido, señaló dos iniciativas empresariales como «dos grandes ejemplos». Uno de ellos Noria TV, una asociación que se gestó en plena pandemia encargada de retransmitir y hacer llegar diferentes actos deportivos y culturales. Hoy en día «es un gran éxito» y tienen un programa deportivo y hacen entrevistas o retransmisiones tanto deportivas como culturales tanto en Guareña como en localidades de los alrededores. Uno de sus representantes, Juan Romero, hizo hincapié en que González les habló del CID para llevar a cabo programas y entrevistas, ya que allí cuentan con un despacho con internet o todos los servicios para montar un estudio de grabación desde donde hicieron, por ejemplo, el último Rally del higo y la aceituna.
En segundo lugar, el diputado se refirió a un proyecto del que «siempre» le han hablado y siguen como Metaphase, «claro ejemplo» de una iniciativa empresarial que empezó en un CID. Joaquín Vieira resaltó que el proyecto del que él forma parte recaló en Alburquerque, la localidad natal de uno de los fundadores. Al principio, contaba ayer, empezaron a trabajar en una casa cuyo estado «no muy propicio» para emprender un negocio. En ese sentido, resaltó que el CID supuso un «punto de inflexión» para ellos gracias a sus intalaciones, que les sirvieron de apoyo.
