La Junta de Extremadura, a través de la Consejería de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio, ha señalado a este diario que "no hay riesgo de un problema generalizado de langosta", en relación a la problemática que denuncian ganaderos de la comarca de La Serena por la elevada presencia de estos insectos en sus explotaciones ganaderas, así como el impacto sobre las mismas.
Así, desde el Ejecutivo regional consideran que las noticias difundidas son de concentraciones que tachan de "puntuales y llamativas, de muy poca extensión, que en general no causan daños y que son habituales a final de campaña".
Del mismo modo, han recordado que en Extremadura hay 400.000 hectáreas de zonas endémicas de langosta, de las que unas 70.000 se encuentran situadas en La Serena y Llanos de Brozas con mayor riesgo de que una concentración de insectos pueda formar plagas. Esta superficie, han indicado, se somete todos los años a una vigilancia "intensiva" y se tratan los focos de mayor concentración de individuos.
Solicitud de UPA-UCE
La organización agraria UPA-UCE Extremadura ha emitido un comunicado en el que pide a la Consejería de Agricultura de la Junta de Extremadura que convoque la mesa de la langosta ante la problemática originada en esta campaña por una plaga de estos insectos en la comarca de La Serena, donde se han visto afectadas explotaciones agrícolas y ganaderas ubicadas en los términos municipales de Cabeza del Buey, Zarza Capilla o Peñalsordo.
Desde esta organización agraria han subrayado la necesidad de reunir de nuevo a esta mesa de trabajo para analizar la problemática que ha surgido y que está generando "daños en miles de hectáreas de explotaciones de cereales y pastos".
El secretario general de la organización en Extremadura, Ignacio Huertas, ha indicado que "tenemos que analizar la situación actual y conocer las medidas que se están adoptando para atajar la plaga actual y evitar que este problema con la langosta se repita en futuras campañas".
Desde el punto de vista de Huertas, las plagas de langosta "pueden convertirse en un grave problema" para las explotaciones afectadas, por lo que cree que es necesario actuar para prevenirlas".
