Esta imagen no se recordaba desde 2.006. Aquel también fue un año de extrema sequía en la comarca de Tentudía, con cierre de piscinas municipales y avisos de restricciones para el consumo humano que, afortunadamente nunca llegaron a producirse. A diferencia de entonces, la situación de este 2.022, resulta mucho más preocupante que la de hace 16 años.

 Por aquellas fechas, el límite mínimo de agua embalsada se produjo en el mes de octubre. Rápidamente llegaron las lluvias otoñales y el pantano se llenó. Hoy, al inicio de un verano que se pronostica como muy seco, el pantano del que se abastecen las poblaciones de esta comarca se encuentra al 18,20% de su capacitad total, o lo que es lo mismo, de sus 5 hectómetros cúbicos totales, la presa únicamente cuenta con 0,91 hectómetros.  El plan de emergencia por sequía indica que, con 0,70 hectómetros cúbicos, el agua deja de ser apta para el consumo humano, con lo que ha comenzado la cuenta atrás para que las restricciones puedan afectar a los más de 20.000 habitantes de la comarca.

El viejo puente

 Desde que en 1.988 se inaugurara el pantano de Tentudía, en muy contadas ocasiones ha emergido el viejo puente sobre el río Bodión. Una pasadera por la que atravesaba la carretera que unía Monesterio con Calera de León antes de la construcción de la presa, que servía de límite territorial entre ambos términos municipales. La última vez que los ciudadanos de la comarca vieron surgir de sus aguas sus oxidadas barandillas fue en 2.006.

 Más allá de los datos periódicos que ofrecen administraciones y confederación, que asome el puente es el indicador más claro de la falta de agua en el pantano para la ciudadanía. A lo largo de los últimos meses los vecinos de la zona han estado muy atentos a esta circunstancia. Si el puente no asoma, aún queda agua en el embalse. Las circunstancias han cambiado en unos pocos días. El efecto del verano está precipitando un descenso del nivel de agua embalsada que se nota por días, y el puente vuelve a ser visible.

 Alguna foto colgada en las redes sociales animó a bastantes curiosos a acercarse durante el fin de semana al pantano para comprobar in situ el afloramiento del viejo puente sobre el Bodión. Algunos, no reprimieron sus ganas de volver a pisarlo.

 La preocupación es generalizada. Hace solo unos días los representantes de los municipios que se abastecen del pantano, aprovechaban la celebración del Día de Tentudía, para reivindicar ante las administraciones la construcción de una nueva presa, como solución definitiva a este problema estructural, que a punto está de afectar muy seriamente las condiciones de vida y la economía de un territorio que clama por el derecho a disponer de agua.