La Trabajadora Social de Monesterio Marisa Vázquez recibe el premio Isern de la Fundación Emouniverso

 La Trabajadora Social, nacida en Monesterio, Marisa Vázquez, acaba de recibir el premio Isern, de la Fundación, Emouniverso, como reconocimiento a su “dedicación y compromiso para hacer de este mundo un lugar más bello”. El acto de entrega tuvo lugar en el transcurso de una gala benéfica, que se celebró el pasado 22 de febrero, en la localidad sevillana de San Juan de Aznalfarache.

 Tras estudiar Filología Inglesa, Marisa Vázquez, realizó un máster en Educación Social que, la marcaría de por vida en su trayectoria profesional. Su primer trabajo estuvo ligado a la asociación Solidarios Para el Desarrollo, en Sevilla. Posteriormente, se trasladó a Madrid. Durante 10 años trabajó en el ámbito del Trabajo Social Comunitario. Actualmente, es la delegada de la asociación ‘Solidarios’ en la capital hispalense. A través del voluntariado, el colectivo trabaja con quienes sufren la exclusión social, la discriminación o la soledad: personas sin hogar, personas mayores que residen solas en sus casas, internos en centros penitenciarios y personas con discapacidad o con problemas de salud mental.

 “La acción voluntaria es la base social de nuestra organización”, expresa Marisa, muy satisfecha con su trayectoria profesional: “Soy Trabajadora Social de profesión y de vocación”. Su máxima gratificación es ver la “progresiva mejoría de las personas” a través de un trabajo solidario que, por sí solo, se convierte en un “aprendizaje personal”. Es, manifiesta Vázquez, “la base de la vida”, pues, los seres humanos, “somos seres sociales y comunitarios”.

 Este reconocimiento llega después de una dilatada carrera, de más de 3 décadas, dedicada por completo a las personas que sufren exclusión. “Esta profesión es así”, remarca la galardonada. “O eres vocacional, te lo crees y lo vives intensamente cada día; o no realizas un buen trabajo”, remarca. Existen situaciones “muy duras”. Las personas privadas de libertad o que viven en la calle, “tienen derecho a una segunda oportunidad”. Así es su trabajo y eso es lo que le gusta.

El galardón

 A través de distintos programas, la Fundación Emouniverso trabaja en el fomento del acceso al empleo, el desarrollo personal y la creación de proyectos, “con alma”, que contribuyan a la calidad de vida y fomenten la convivencia ciudadana, la inteligencia emocional o los valores humanos y la cohesión social, en diferentes lugares del mundo. Cada año, convoca una gala benéfica donde se entregan los premios Isern, para el fomento de los valores humanos. Con este galardón se rinde homenaje a personas y entidades que, por su trabajo y solidaridad, “transforman el mundo”.

 En esta edición, uno de sus premios ha recaído en la monesteriense Marisa Vázquez, directora de los programas de mayores, salud mental, sin hogar y prisiones de la Fundación Solidarios de Sevilla, “por su casi, 30 años, dedicados a la transformación social en diferentes fundaciones y ONG”.

 Muy ilusionada, Marisa Vázquez, comparte este premio “con todas esas personas a las que he acompañado y que me han acompañado durante mi carrera profesional”, personas, “muy importantes, que me han hecho aprender a vivir de una forma humilde y a pensar en los demás”. Un reconocimiento, también compartido con su pueblo, Monesterio, “al que siempre llevo en mi corazón”, concluye.