Muchos videos e imágenes se han comenzado a difundir en las redes mostrando como los policías de tránsito en Estados Unidos y otros países tocan la parte trasera de los vehículos que detienen antes de entrevistar al conductor.

Esta costumbre tiene una importancia de vida o muerte ya que en caso de alguna tragedia involucrando a los usuarios del vehículo, las huellas del oficial en caso de ser herido o abatido podrán relacionar el vehículo con el hecho.

En muchos países la policía rural cuenta con cámaras instaladas en sus coches oficiales, las cuales registran todo el proceso de inspección, de esa forma queda en video el sitio exacto donde el oficial puso su mano. Esto hace posible una búsqueda más precisa por parte de los peritos a la hora de identificar el vehículo en cuestión, aunque cambien sus placas.

Otro de los motivos, es que muchas emboscadas contra los oficiales del orden ocurren utilizando hombres ocultos en el maletero, de esta forma el efectivo que lleva a cabo la inspección se puede asegurar de que el maletero del vehículo está completamente cerrado, aunque la posibilidad siempre está latente ya que actualmente el maletero de la mayoría de los coches se abre desde el asiento del chofer.

Asimismo, también es parte del protocolo policial acercarse al vehículo por el lateral, de forma que, en caso de huida, no pueda atropellar al oficial que realiza la inspección. Con relación a esto, los policías suelen poner una segunda vez su mano en el techo del auto para dejar una segunda zona marcada una vez se hallan cerca del conductor.