Las obras de la conducción entre los embalses de Portaje y Guadiloba sufren un nuevo retraso, según confirmó ayer la Confederación Hidrográfica del Tajo. De la previsión de acabar este trasvase en junio de 2012, anunciada en octubre de 2010, se pasa ahora a noviembre de 2013. En septiembre de 2009 se dijo que acabaría en marzo del año 2011. Si no hubiese habido retrasos ni reformas en el proyecto, tendría que haber terminado en 2010.
La causa de este nuevo aplazamiento es que la prórroga de los presupuestos del Estado el 31 de diciembre de 2011 supuso "una modificación de las anualidades de la inversión, siendo la nueva fecha prevista de la finalización noviembre de 2013", según precisó la Confederación, que no entró en más detalles, dado que se está "a la espera" de los presupuestos para 2012, que se prevé que estén antes de que finalice el primer trimestre del año.
Los presupuestos de 2011 recogían una inversión para la mejora del abastecimiento de Cáceres y su entorno de 11,6 millones, mientras que la proyección para 2012, anualidad en la que se tenía que acabar la obra, era de 16,1 millones. De la conducción de Portaje no solamente se abastecerán Cáceres, Sierra de Fuentes y Malpartida de Cáceres, sino además otra decena de poblaciones cercanas a estas tres.
El PP, que está en el gobierno de la nación y municipal, se opuso a estas obras cuando estaba en la oposición, apostando por una presa en el Almonte. Ahora debe gestionar su finalización.
Las obras de esta conducción están ejecutadas en más de un 80%. Están colocados 62 kilómetros de tuberías de una conducción que en el proyecto original tenía 78,4 kilómetros (en el verano de 2010 se introdujo un reformado en el proyecto, que modificó una parte del trayecto para salvar el Tajo y el Almonte, aunque no ocasionaba una variación sustancial de kilómetros). Precisamente uno de los tramos que faltan son los pasos de los ríos, para lo que se diseñaron pasarelas para sustentar las tuberías.
De este trasvase de agua de Portaje al Guadiloba tras recorrer casi 64 kilómetros depende el suministro de agua a Cáceres con garantías, sin tener que depender, como ocurre ahora, de la evolución de la cota de Alcántara, dado que si baja de la 191 (metros sobre el nivel del mar) no se puede trasvasar agua del río Almonte hasta el Guadiloba, un trasvase que durante la mayor parte del año es actualmente y a la espera de Portaje la principal fuente de suministro.
UNAS OBRAS NECESARIAS La conducción no solo comunica Portaje con Guadiloba, sino también la margen izquierda del canal del río Alagón con Portaje, otros 14 kilómetros, para garantizar que si el embalse de Portaje se queda sin agua se pueda coger del embalse de Gabriel y Galán.
Que las obras de Portaje se retrasen tiene como parte positiva que no se tendrá que hacer una nueva subida de la tasa del agua. Pero si se prolonga la actual escasez de lluvias durante otro año hidrológico, este retraso se convierte en un grave problema, algo que ya pasó durante el último trimestre de 2009 y se repitió en otras ocasiones durante la década (enero 2002, abril 2005 y noviembre 2007) cuando la cota de Alcántara descendió tanto que se tuvo que suspender el trasvase del Almonte o tomar medidas extraordinarias para no pararlo.
El retraso que se anunció ayer es el tercero. La primera piedra se puso en el mes de diciembre de 2007, aunque las obras no se iniciaron hasta un año después, tras completar las expropiaciones. El periodo de ejecución era de 18 meses, por lo que tendría que haber finalizado a mediados del año 2010. Pero la imposibilidad de ejecutar el proyecto inicial para pasar los ríos Tajo y Almonte obligó a realizar un reformado en el proyecto y a aplazar la finalización hasta marzo de 2011, fecha que se retraso hasta junio de 2102 y ahora hasta final de 2013.
