El pasado 31 de diciembre una plataforma ciudadana inició una campaña de recogida de firmas para pedir la paralización de las obras para el futuro trasvase de agua desde el embalse del Portaje al pantano del Guadiloba y ayer el gobierno local puso de manifiesto su sintonía con esta iniciativa vecinal que trata de impedir el incremento que supondría en la factura el sobrecoste de bombear el agua desde Portaje a Cáceres.

"Es una barbaridad y va a suponer un coste que el ayuntamiento no está dispuesto a asumir ni a repercutir al ciudadano", señaló el teniente de alcalde y portavoz del equipo de gobierno, Valentín Pacheco, que recordó que ya en el 2010 (cuando aún estaban en la oposición) expresaron sus discrepancias a este proyecto a los representantes de la Confederación Hidrográfica del Tajo.

Pacheco señaló que "el sentir general de los ciudadanos es que ya el agua ha subido bastante con el canon de los 30 millones, y si se ejecuta ese proyecto de la forma que está pergeñado, va a volver a subir el recibo del agua y eso no lo vamos a aceptar. Si se pretende repercutir directamente sobre el ciudadano cacereño, nos van a encontrar de frente", aseveró.

70 KILOMETROS El proyecto de la conducción que se ejecuta para traer el agua desde Portaje al embalse del Guadiloba comenzó a tramitarse en el 2004 y está completada en un 75%, lo que supone que más de medio centenar de los 70 kilómetros que tiene están ya construidos. El proyecto se adjudicó en el 2007 a la unión temporal de empresas integrada por Sando y Befesa, del grupo Abengoa, por 40,4 millones de euros (20 millones menos del precio de licitación), aunque posteriormente el proyecto se encareció hasta los 49,3 millones por una modificación planteada al proyecto para construir unas pasarelas para salvar ambos ríos. La inversión en estas obras está actualmente en 61,5 millones.

Las primeras previsiones situaban la puesta en marcha del trasvase en el año 2011, fecha que ya se dilata más allá del 2016, según las últimas proyecciones presupuestarias del Ministerio de Medio Ambiente.

"Si ahora --si el proyecto de Portaje se pone en marcha-- tienes que traer el agua a 70 kilómetros por una tubería, con un recorrido que además serpentea y que necesita que se coloquen una serie de impulsos para que el agua llegue, eso hay que pagarlo y va a encarecer mucho el precio del agua", afirmó Pacheco sobre el incremento que va a suponer en la factura el proyecto.

Ese incremento es el principal motivo de oposición de la plataforma ciudadana que se ha creado contra este trasvase --han cuantificado en un 300% la subida sobre la tarifa actual para hacer frente al pagote al pago de la infraestructura-- y que hoy concluirá la campaña de recogida de firmas que inició el día de Nochevieja. Ayer permaneció una mesa informativa en una esquina del edificio Múltiples, junto a la entrada de Correos, y hoy estará en ese mismo punto y en la plaza de San Juan de 11.00 a 14.00 horas.

"Por el momento hemos recogido más de 500 firmas", cuantificó ayer Fernando Figueroa, uno de los integrantes de la plataforma ciudadana. A ella habrá que sumar las que se recojan en esta última jornada en y también las que hayan acumulado distintos establecimientos de la zona centro que están colaborando. Las firmas se remitirán junto a la CHT junto a la alegación al proyecto que está en exposición pública y que ha redactado el ingeniero Agrícola Ramón Pavón. En ella plantea que se mantenga el actual trasvase desde el Almonte.