Los secadores daban ayer más calor que nunca, las clientas salían especialmente satisfechas, y las profesionales ponían todo el ahínco en cada peinado. El centro de estética y peluquería regentado por María del Mar Delgado y María Belén Jiménez, en la calle Pedro Romero de Mendoza, de Mejostilla, organizó una jornada solidaria en la que prestó gratuitamente sus servicios a cambio de que las clientas donasen alimentos para las familias necesitadas. Las propietarias también corrieron con todos los gastos de agua, luz y productos necesarios para el trabajo.

Hubo tanto público que fue necesario pedir prestadas sillas a la multitienda vecina e improvisar un segundo salón en la calle, extendiendo los enchufes y sacando afuera todos los accesorios. Incluso se unieron otros peluqueros de la ciudad para aportar su esfuerzo. Peine, cepillo y pinzas en mano, una decena de profesionales trabajaron sin parar: Estefanía, Daniela, Cristina, Montse, Montaña, Dani...

400 KILOS RECABADOS Poco antes del mediodía ya se habían realizado cuarenta peinados y los alimentos no cabían sobre la mesa. La cabina también funcionaba sin parar con depilaciones faciales y manicuras a cero euros. El balance final, a las nueve de la noche, fue de un centenar de peinados; decenas y decenas de arreglos estéticos; y 400 kilos de alimentos y de otros productos de higiene y limpieza, entre ellos aceite, leche, azúcar, pañales, papillas, potitos...

"La causa merece todo lo que hagamos. Hay gente que está pasando necesidades y no podemos dejar de ayudarles", explicó a media mañana María del Mar Delgado, una de las titulares del salón. "Nosotros ponemos al servicio de la gente lo que mejor sabemos hacer. Lo bueno es que la idea parece extenderse. Otra peluquera que ha venido a ayudarnos quiere repetir la experiencia en noviembre", indicó su compañera, María Belén Jiménez.

Los alimentos llegarán a las familias a través de la asociación Mejostilla Solidaria, integrada en la Red de Solidaridad Popular (RSP), una organización de carácter social que presta ayuda a numerosas familias sin recursos en la capital cacereña, su ámbito de actuación. Dicha red, surgida en varias ciudades españolas, tienen como fin la colaboración entre iguales para hacer frente a la crisis, que azota a un buen número de hogares. En Cáceres comenzó a consolidarse hace seis meses en la Mejostilla con un centenar de personas de la barriada, y ha empezado a extenderse a otros distritos.

En concreto, según informa la Red Solidaria Popular, actualmente cuenta con una despensa que reparte quincenalmente alimentos a casi cincuenta familias, y está desarrollando otros proyectos como la recogida y reparto de material escolar y la creación de un huerto ecológico solidario autogestionado.