Seis de cada diez cacereños (56%) realizan sus desplazamientos habituales en coche, y algo más de cada tres (34%) a pie. Solo uno (9,6%) coge el transporte público, mientras que la bici apenas tiene una presencia testimonial. La excesiva prevalencia del vehículo privado y la menor movilidad peatonal pese al tamaño de Cáceres (en otras ciudades de similares dimensiones se camina más y se conduce menos) hacen prever un futuro "poco sostenible", de ahí que el objetivo sea reducir hasta el año 2024 la cuota del vehículo privado al menos hasta el 50. Así lo pretende el nuevo Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PIMUS), recientemente presentado por la alcaldesa, Elena Nevado, que incluye propuestas para reducir el impacto del tráfico.
La población de la ciudad ha seguido creciendo en la última década entre el 0,3% y el 1,5% cada año. El volumen circulatorio que registra Cáceres también ha pasado de 70.000 vehículos a casi 90.000. En concreto, a diario se registran 89.588 desplazamientos en coche por la ciudad en vehículos particulares, más 9.600 de origen externo que acceden hasta el centro. Es un número elevado que además contrasta con su poca ocupación (1,3 personas por coche) y con la media recorrida (2 kilómetros en los trayectos internos). Así se desprende del análisis que realiza el PIMUS para conocer la realidad y aportar soluciones.
PRINCIPALES DESTINOS En dicho análisis hay datos curiosos que retratan las rutinas de los cacereños. Respecto al origen y destino de los desplazamientos diarios, la mayor parte son de tipo interno al propio municipio (96%) y los más numeroso acaban en el casco viejo (centro urbano), con casi un 11% de los viajes; en la Universidad, con el 7%; y en Las Capellanías, con el 2,3%.
En cuanto a los motivos para desplazarse cada día, el porcentaje mayor es el de la 'movilidad obligada' (trabajo y estudios) que supone más del 50% de los desplazamientos. En la 'movilidad no obligada' primero se sitúan las compras (27,3%), a continuación el ocio (12,5%) y las visitas al médico (5,29%). Curiosamente, en los viajes al trabajo el medio fundamental es el vehículo privado (82,8). Sin embargo, cuando se sale de ocio la gran mayoría se desplaza a pie (88%).
Al observar la duración de los trayectos, se aprecia que en el 60% de los casos no supera los quince minutos, "lo que pone de manifiesto una sobreutilización del vehículo privado en desplazamientos cortos, que quizá permitiría el uso de modos de transporte más sostenibles", indican los técnicos que han analizado la situación de la ciudad.
Hay otros datos llamativos: los cacereños consumen 4,2 millones de litros de combustible al año y generan un impacto ambiental de 10.360 toneladas de CO2.
Mientras tanto, los desplazamientos a pie --los que tienen una duración mayor a 5 minutos-- suponen prácticamente la mitad de los que se realizan en coche privado (34% del total). Esto quiere decir que solo 1 de cada 3 trayectos se realiza caminando, "un dato extremadamente bajo comparado con otras ciudades de similar tamaño, en las que se suele llegar al 50%", recoge el PIMUS, que pretende elevarlo al 36,5% en 2024. Y es que a pesar de las barreras físicas y la dispersión de los barrios del norte, Cáceres presenta distancias asumibles para buena parte de la ciudad. Además, la movilidad a pie ni siquiera es mayoritariamente voluntaria, ya que el principal motivo para andar es no tener coche.
Las mayores densidades de actividad y vivienda, unidas a las calles con tráfico más restringido, son las que marcan las áreas en las hay mayor presencia de gente caminando. Se trata de la zona entre el bulevar de Cánovas y la Plaza Mayor, que ejerce todavía la centralidad tradicional de la ciudad, además de ser el punto principal de entrada al casco. Esta presencia se ve reforzada por la existencia de numerosos espacios de uso ciudadano cerrados al tráfico de paso.
Respecto al uso del autobús urbano, solo lo utilizan un 9,6% de los encuestados y supone una media de 18.000 viajes diarios en días laborables, un valor también inferior al de otras ciudades de características asimilables a Cáceres. El PIMUS quiere elevarlo al 12% durante los próximos diez años para hacer una ciudad más sostenible y respetuosa con el medioambiente.
En líneas generales, el trazado de las líneas tiene recorridos funcionales que conectan la zona central con urbanizaciones, polígonos y equipamientos lejanos como el Campus. Además,
