La tercera fase de la obra del seminario comenzó hace ya dos meses. En este tiempo se han llevado a cabo los trabajos de renovación de alcantarillado y desagües. Además se ha colocado el material impermeable en todo el edificio, que permitirá su aislamiento térmico. Y es que una de las bazas de la obra es precisamente el ahorro energético mediante la utilización de energía geotérmica. Se prevé que se reduzca el gasto en 35.000 euros anuales. Ya está preparada la caseta donde se colocará todo el sistema de climatización, a falta de instalar la maquinaria.

Para lograr un mejor aislamiento se cambiará la carpintería de las puertas y ventanas y se pondrá suelo radiante. Así, la climatización irá por el suelo y se colocarán también ventiloconvectores de aire acondicionado, que funcionarán con el mismo agua del suelo radiante, que será refrescante en verano.

Por otro lado, se ha ampliado la anchura de la puerta principal para permitir la entrada de camiones. La medida se respetará después de la obra para favorecer el acceso de autobuses al interior del edificio. La tercera fase está dotada con 4 millones de euros e incluye también la construcción de dos pistas de pádel que se alquilarán al público para obtener fondos.

Además, la biblioteca de Filosofía y Teología tendrá acceso directo desde Pinilla y se habilitará un horario de consulta y el Archivo Histórico Diocesano ampliará sus dimensiones con la incorporación de los más de 40.000 volúmenes. La obra tiene un plazo de ejecución de 26 meses.

En obispado anunció ayer que han aumentado las aportaciones externas que ayudarán a sufragar la obra. Hasta el momento tres familias han colaborado para costear una habitación (6.000 euros) y dos parroquias ayudarán también con inyección económica. Se han duplicado además las ayudas para el mantenimiento del seminario, pasando de los 6.000 euros aportados en 2013 a los 14.000 en 2014.