La decisión sobre la alcaldía de Cáceres se está debatiendo en Madrid. Se está en ese escenario y en estos días se ha movido más en ese ámbito que en el local, al que se trasladará la próxima semana. Carlos Cuadrado, secretario de Finanzas de Ciudadanos y encargado por el partido para las negociaciones en Extremadura, ha mantenido contactos con el PSOE, el pasado miércoles el secretario regional de los socialistas, Guillermo Fernández Vara, estuvo en Madrid, y con el PP, que cuenta con un comité por la gobernabilidad que está dirigido por el secretario general del partido, Teodoro García Egea.

Ayer estaba todo abierto. El candidato de Ciudadanos a la alcaldía, Francisco Alcántara, no se movió ni a la izquierda ni a la derecha y admitió que estaba a la espera de las directrices que marque el comité nacional de pactos de su partido. Es un escenario nuevo en el que las decisiones exceden de lo local y el acuerdo sobre la alcaldía se está gestionando «en Génova, Ferraz y Ventas -sedes nacionales del PP, PSOE y Cs-», comentó Alcántara, situación a la que luego «tendremos que sacar provecho en Cáceres», añadió.

Alcántara reiteró que aún no hay ningún pacto cerrado para la gobernabilidad en Cáceres, ni siquiera con el PSOE, pese a que ayer mismo diversas fuentes daban por hecho un principio de acuerdo entre Cs y PSOE y que se estaba a la espera de que el comité nacional de pactos de Cs permitiese que se abriesen las negociaciones con el PSOE en Cáceres, incluso las fuentes citadas reiteraron que hay malestar en Cs en Cáceres porque «están atados de pies y manos» por Madrid. El número uno de Ciudadanos en la ciudad aseguró que no hay acuerdo y que el pacto real «será el que venga de arriba hacia abajo».

La autorización del comité nacional de pactos para abrir la negociación con el PSOE en el ámbito local se dio ayer por la tarde. El PSOE de Cáceres había pedido la tarde del jueves a Ciudadanos mantener una primera reunión para empezar a negociar un acuerdo de gobierno en la ciudad, lo hizo un día después del encuentro entre Cuadrado y Vara. La reunión se celebrará el lunes y será el primer encuentro formal entre las candidaturas locales. Cs hará entrega a Luis Salaya, candidato del PSOE a la alcaldía, del mismo documento con 25 medidas que el pasado lunes ya entregó al candidato del PP a la alcaldía, Rafael Mateos.

Por un lado Cs avanza en la relación con el PSOE y por otro lado sigue abierta la negociación con el PP, que para Ciudadanos es el socio preferente, unos contactos que no solo se han tenido en el ámbito local, ya hubo un encuentro el pasado lunes, sino también en el nacional entre Cuadrado y sus interlocutores en el comité por la gobernabilidad del PP.

LAS CAPITALES / Según fuentes consultadas por este diario, en esos contactos Cs planteó inicialmente que una de las dos alcaldías de las capitales extremeñas fuese para ellos, preferentemente la de Badajoz, la mayor ciudad de la región, pero en negociaciones posteriores se ha puesto sobre la mesa que sea la de Cáceres la que tenga al frente al candidato de Ciudadanos, en este caso a Francisco Alcántara. No obstante para Cs sería más fácil apoyar al candidato del PP en Cáceres, Rafael Mateos, que no ha ostentado el cargo de alcalde y que encaja más en el mensaje de regeneración que defiende Cs, que al de Badajoz, Francisco Fragoso, quien es alcalde desde 2013, aunque no ha completado dos legislaturas. En las negociaciones con el PP en Castilla y León, Cs ha pedido la salida de los alcaldes que llevaban dos legislaturas.

Sin embargo, en Badajoz Ciudadanos solo tiene cuatro de los 27 concejales de la corporación, mientras que en Cáceres cuenta con cinco de los 25 ediles, por lo que tendría más capacidad y una mayor presencia dentro de un gobierno con el PP, que cuenta con siete concejales.

Pero el acuerdo y pacto de gobierno entre PP y Cs en Cáceres necesita que sea refrendado por el concejal electo de Vox, Teófilo Amores, con su voto en el pleno de investidura que se celebrará el 15 de junio. PP y Cs suman 12 concejales, pero necesitan 13 votos en la sesión en la que se elegirá al alcalde. Ese es uno de los escollos para un pacto PP-Cs.

El comité ejecutivo nacional de Cs decidió el pasado lunes que no se sentará en ninguna mesa de negociación con Vox y Amores aseguró el martes que no podrá dar su voto en la investidura al candidato de un gobierno de PP y Cs si Ciudadanos se niega a negociar con Vox. Ayer reiteró que su posición no ha variado, pero recordó que aún queda una semana para el pleno del día 15. Amores, que no quiere entrar en el gobierno local, ha dicho en varias ocasiones esta semana que por programa y propuestas sería fácil alcanzar un acuerdo con PP y Cs para darles su apoyo en el pleno de investidura, pero ha insistido en que Cs tendría que negociar con Vox las condiciones de ese respaldo. Fuentes de Cs y PP confiaron ayer en que al final Vox daría su voto a un gobierno de estos dos partidos si se enfrenta a la tesitura de que si no lo hace acabaría permitiendo un gobierno del PSOE en la ciudad.

Si no hay un acuerdo entre PP y Cs al no conseguirse el voto de Vox, la alcaldía sería para Luis Salaya, que se ha mostrado a favor de formar un gobierno de coalición con Ciudadanos, un ejecutivo que contaría con 14 concejales, mayoría suficiente para no depender de un tercer partido en el pleno de investidura.