El traslado de los servicios sanitarios que se venían prestando en el hospital Nuestra Señora de la Montaña concluye esta semana con el cierre de la seis consultas de alergias, que es lo único que todavía permanece activo, aparte del Punto de Atención Continuada (PAC) que se mantendrá en el edificio hasta encontrar un lugar adecuado para su ubicación.

Así, entre el viernes y el sábado y «si no hay ningún inconveniente» está previsto que cierren sus puertas las consultas de Alergología, tal y como ha confirmado a Europa Press, el gerente del Área de Salud de Cáceres, Juan Carlos Escudero, con lo que la docena de profesionales que atiende este servicio abandonará también el inmueble, que es propiedad de la Diputación Provincial.

Ya se ha realizado el traslado del resto de servicios, incluyendo la Unidad del Dolor y la Unidad Breve de Hospitalización de Psiquiatría, que se han llevado al Hospital San Pedro de Alcántara, de manera que el cierre del inmueble y la entrega de llaves a la institución provincial se producirá en las próximas semanas.

Con esto, solo quedaría ubicar el PAC para el que el Servicio Extremeño de Salud (SES) y el Ayuntamiento de Cáceres trabajan de forma conjunta con el objetivo de encontrar un local adecuado para el servicio. El traslado al centro de salud Manuel Encinas o al de San Jorge se ha descartado porque no hay sitio para acoger ni los recursos ni a los profesionales que atienden el PAC.

«Cuando antes podamos cerrar el edificio, mejor», ha dicho Escudero en alusión a los costes de mantenimiento que supone tener el inmueble en funcionamiento para un único servicio, y también para mejorar la situación para el personal que debe mantenerse allí de forma «incómoda», prácticamente en solitario.

Como ya informó este diario, para despedir al hospital provincial, que llegó a contar en sus mejores épocas con unos mil trabajadores, los propios profesionales que han pasado por allí, en colaboración con la Gerencia del Área de Salud, han convocado un acto de despedida para el miércoles, día 30, a las 18.00 horas.

La cita consistiría en dar un abrazo al edificio, rondeándolo entre los asistentes, para «decir adiós al que siempre será un hospital de referencia en la ciudad». Además se expondrán fotografías que repasarán la historia del hospital y se proyectará un video que recogerá los mejores momentos del centro. Podrá participar cualquier persona que lo desee.