El pleno de la corporación local del ayuntamiento debatió este jueves durante más de una hora sobre el comercio de la ciudad. Todos los participantes coincidieron en que la situación está muy mal. Es verdad que para eso no hacía falta que se hubieran reunido, es algo sabido. Pero eso y la necesidad de actuar es justo lo que propició que se tomase una decisión por unanimidad. «El sector necesita que lleguemos a acuerdos», sentenció la concejala de Economía y exgerente de la Asociación de Empresarios del Comercio de Cáceres (Aeca), María Ángeles Costa, cuando cerraba su intervención. Ese acuerdo, que puede parecer poco pero que ya es algo, es la constitución de un grupo de trabajo que estudie las causas del deterioro comercial y elabore una relación de propuestas.

La creación de este grupo sale de la moción presentada por el grupo municipal del PP para la adopción de medidas que favorezcan al comercio y de la enmienda que a la misma presentó el concejal no adscrito Teófilo Amores, quien fue secretario de la Cámara de Comercio de Cáceres. En el debate de este jueves se echaron en falta medidas concretas. Nadie puso ninguna sobre la mesa. Para eso se creará ese grupo, que se pretende que funcione con la misma rapidez y eficacia que los que se constituyeron durante el confinamiento y de los que salieron con la aportación de todos el plan de ayudas a autónomos y pymes y el incremento de las aportaciones de urgencia social.

USOS / Quitando la parte de las intervenciones en las que unos a otros se echan en cara la responsabilidad del deterioro del sector, la discusión se centró más en reconocer que las calles comerciales tradicionales de la ciudad se encuentran en una situación delicada y necesitan un cambio. En este punto la única novedad fue la que oportunamente había aportado un día antes el concejal de Urbanismo, José Ramón Bello, al apuntar que locales de calles como Pintores tendrían que tener más usos urbanísticos, que no fueran exclusivamente comerciales. A Bello se refirió el portavoz del PP, Rafael Mateos, al compararlo con un bombero que apaga los fuegos que encienden sus compañeros en el equipo de gobierno.

Mateos justificó la presentación de la moción porque el comercio «languidece» y porque «o se empiezan a poner soluciones sobre la mesa o Cáceres se queda sin comercio». Amores, del que partió con su enmienda la creación del grupo de trabajo, recordó que el comercio «se encuentra en declive desde hace años» e insistió en que se necesita «un planteamiento serio para enderezar el problema», punto en el que aplaudió la idea de Bello de ampliar los usos de los locales. El edil de Urbanismo habló el miércoles de calles con comercios, oficinas, restauración y más tiendas de recuerdos y productos de la zona aprovechando el tirón del turismo.

Hubo una idea que durante el debate expusieron Mateos, el alcalde, Luis Salaya, y el edil no adscrito Francisco Alcántara, quien tras recordar que las calles comerciales se han visto afectadas por «una ola gigantesca que asola al comercio tradicional y por la irrupción definitiva del comercio online», añadió que poblaciones del entorno de Cáceres, citó Don Benito, Mérida y Badajoz, han sabido «mantener y potenciar» sus ejes comerciales. Mateos afirmó en su segundo turno que la pregunta es «por qué los cacereños se van a Badajoz, Sevilla y Madrid a comprar». Y Salaya invitó a que cuando se convoque esa mesa se responda a «por qué cuando los hábitos de consumo en otras ciudades empiezan a favorecer al comercio y las calles tradicionales, en nuestra ciudad y en otras con sus características no se genera esa misma dinámica».

La creación de ese grupo se aprobó con el voto de todos los concejales. El edil de Ciudadanos Antonio Ibarra consideró que el problema del comercio en Cáceres «es estructural». «Para que Pintores esté lleno también deben estarlo los polígonos empresariales de Capellanías y Mejostilla», agregó el concejal.

La portavoz de Unidas Podemos, Consuelo López, comentó que el comercio baja porque no se consume y recordó medidas que se han tomado desde la administración estatal como el incremento del salario mínimo interprofesional y el ingreso mínimo vital. Abogó por la peatonalización para «fomentar» el comercio.

«La situación del comercio es complicada», reconoció Costa, que recordó que en los contactos que en la pasada legislatura se mantuvieron con empresarios y el colegio de agentes de la propiedad se expuso que hay «un problema grave» que es «la acumulación en pocas manos de la propiedad y unos precios de los alquileres poco realistas». La concejala, que también está al frente de la delegación de Economía, descartó una bonificación en el IBI que pagan los propietarios de los locales porque «no soluciona el problema».

El debate en el pleno se produce una semana después de la manifestación de empresarios por la limitación del tráfico desde San Antón y del escrito que contra la misma presentó la asociación de empresarios del comercio.