«Aterricé en Estambul a las once de la noche, después de cuatro horas de vuelo y dos películas de esas de domingo por la tarde para echar la siesta. A la salida me esperaba un señor con un cartelito con mi nombre y el de la clínica. Este me llevó a otro y ese otro a un tercero, que a su vez me metió en el coche de una cuarta persona… cosas de Turquía». Lo cuenta Rivas en ABC, un testigo directo de la cosa. «Seis meses... y sigo sin cortarme el pelo. Parece que fue ayer cuando estuve en Turquía, pero ya han pasado seis meses… y mi aspecto es muy diferente al que tenía antes del viaje. ¡Tengo pelo! Que antes también tenía, no vamos a decir que no, pero de esos que te dejas largos para intentar tapar esas entradas que empezaban a parecer autopistas».

Como Rivas, miles de españoles, de ellos muchos extremeños, han comprado el mismo billete. Pero para qué viajar a Turquía teniendo Cáceres aquí al lado, la ciudad donde el doctor Yelidá Oyola aborda ya los tratamientos capilares en su clínica de la calle San Juan de Dios. Lo hace desde este otoño y es pionero en Extremadura en esta materia. «La técnica está basada en el método FUE (folicular unit stractation/extracción de unidades foliculares) y permite la regeneración del cabello perdido en un período corto de tiempo y con una durabilidad hasta ahora difícil de conseguir», señala.

El médico especializado en medicina estética y regenerativa indica que esta técnica de implantología capilar consiste «en extraer unidades foliculares de zonas laterales y posterior del cuero cabelludo para trasplantarlas en las zonas receptoras. Es mínimamente invasiva, apenas contempla complicaciones, no precisa hospitalización y solo requiere anestesia local».

Su paso por el Cacereño

Su paso por el CacereñoOyola, muy conocido en la ciudad por su faceta deportiva tras su paso por el Cacereño en la década de los 90, con el nombre de pila de Yeli, es director médico de la Clínica Revitae. Asegura que el tratamiento que lleva a cabo es avanzado y seguro, y añade que para el mismo solo se utiliza instrumental de última tecnología y precisión, «al tiempo que no deja cicatrices visibles, la recuperación es rápida y el resultado es muy natural y sin pérdida de sensibilidad en la zona injertada».

Los injertos capilares sirven en su mayor parte tanto para hombres como para mujeres, que buscan volver a recuperar su melena o que presentan poca densidad de pelo en las zonas frontal y parietal del cuero cabelludo.

Para desarrollar esta técnica, la clínica cacereña cuenta con la supervisión de la doctora especialista en cirugía capilar Anabel Delgado, que asegura que en el sexto mes tras el trasplante «ya se aprecia una gran densidad de pelo en la zona en cuestión y el efecto se convierte en óptimo a los 12 meses de concretarlo».

Oyola añade que desde Cáceres se hace tanto el injerto capilar como el seguimiento del paciente durante todo un año. Para asegurar el éxito del trasplante, posteriormente a este se trabaja en esa zona con una técnica de vanguardia basada en células madre. Lo dicho, viajar a Turquía ya puede quedar lejos.