Aunque las hermandades tienen sus iniciativas paralizadas por la falta de movilidad, ánimos e ingresos, algunas restauraciones no pueden esperar más. Es el caso de la cofradía del Cristo del Humilladero, que ya está organizando el traslado de su imagen titular hasta el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico. Allí se le practicará una completa restauración para eliminar la carcoma, las grietas, la pérdida de policromía y los corrimientos de la madera. El Cristo del Humilladero figura entre las talla más antiguas de Cáceres, junto con el Cristo Negro, el Cristo de la Expiración y el Cristo de las Indulgencias, todos del siglo XIV.

Por su parte, la cofradía de Jesús de la Humildad y la Esperanza, del Vivero, ha presentado la imagen de San Juan Evangelista que iba a incorporar a su misterio del Prendimiento el pasado Domingo de Ramos, procesión que no pudo salir. De este modo, ya forman parte del paso el Señor de la Humildad, Judas Iscariote, un sayón y San Juan. Posteriormente se incorporarán las figuras de San Pedro y el guardia del Sanedrín, de manos del escultor Ventura Gómez Rodríguez (Sevilla).

De otro lado, la cofradía de la Salud ha retrasado la incorporación al paso de la Injusta Sentencia de dos imágenes, Barrabás y un romano, así como la candelería del paso de la Virgen de la Estrella. Su estreno estaba previsto para los años 2021/2022, pero se demorará hasta que se puedan asegurar todos los pagos.