El ayuntamiento será «inflexible» con las pintadas en la calle. El portavoz del equipo de Gobierno, Andrés Licerán, reiteró este viernes su compromiso con poner fin a los grafitis que deterioran las fachadas y «la imagen» de la ciudad. El concejal hizo estas declaraciones a los medios tras la Junta de Gobierno. Así, confirmó que esta semana la Policía Local ha multado a una persona en la Mejostilla por este motivo y volvió a recordar Licerán que los autores de pintadas en el patrimonio urbano, ya sea público o privado, se enfrentan a multas que pueden ascender hasta los 3.000 euros.
«Vamos a seguir persiguiendo este tipo de actitudes y hacemos un llamamiento a todo el mundo para que sea todo lo reivindicativo que quiera pero que se haga dentro de unos cauces legales que no supongan un deterioro de las fachadas», puso de manifiesto en alusión a las últimas pintadas que han aparecido en algunas fachadas de la ciudad en contra de las fotovoltáicas y la construcción de la mina en la Sierra de la Mosca y pidió a los autores que «detengan este tipo de acciones y esta manera de expresarse» ya que lo único que consiguen es «dañar el patrimonio». Fue en la calle Pizarro, en la pared de uno de los negocios de hostelería que se encuentra clausurado debido a las restricciones por el coronavirus donde aparecieron esta pasada semana mensajes reivindicativos escritos con espray que rezaban: «La mina, un cáncer en el pulmón de Cáceres», «Cáceres, la primera en energía y la última en industria y renta» y «Más encinas, menos placas».
