«Estas caminatas nos vienen bien a todo el mundo, sobre todo a nosotras, ya que somos más mayorcitas y necesitamos movernos». Así lo explica Encarna García, que a sus 80 años literalmente no para. Una vez a la semana acude a los ‘Paseos de Acompañamiento Emocional’ por Cabezarrubia, por la parte antigua, por el Paseo Alto, «por todos sitios, según nos lo planteemos». Y otros tres días por semana hace gimnasia de mantenimiento en el Parque del Príncipe, también con los talleres del Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS). «Todas las mañanas las tengo ocupadas con actividades, hay que ejercitarse, nos lo pide el cuerpo aunque te encuentres bien. Los mayores debemos movernos a diario», aconseja.

Encarna, viuda, vive sola en su hogar. Lleva largos años vinculada a las actividades de animación comunitaria del ayuntamiento para dinamizar su día a día. «Ahora, además de caminar, aprendo cosas nuevas. Nos juntamos en un grupo que ya nos conocemos de años y me ayuda a relacionarme muchísimo», confiesa.