El alcalde de Cáceres, Luis Salaya, espera que las nuevas normas de tráfico, que han entrado en vigor este martes y que limitan la velocidad de circulación en el casco urbano a 20 y 30 kilómetros por hora, contribuyan a reducir los accidentes de circulación como el que ha tenido lugar ayer por la tarde en la avenida del Ferrocarril, con el vuelco de un coche a la altura de Leroy Merlín. Se trata del segundo accidente grave que ocurre en ese punto en las últimas semanas tras el atropello mortal que le costó la vida a un hombre de 89 años el pasado 6 de abril. El conductor dio positivo en alcohol y el peatón fallecido cruzaba la carretera desde el barrio de El Perú en dirección a la jefatura de policía y ha sido arrollado cuando rebasaba la mediana de la carretera.

A partir de este martes en esa vía el límite de circulación se limita a 50 kilómetros por hora en todo su tramo. «Hay que ser muy precavidos en la circulación en el casco urbano y espero que con las nuevas limitaciones se vea un descenso en el riesgo de los accidentes, porque si respetamos las limitaciones de velocidad las consecuencias de los accidentes se reducen mucho, especialmente en los atropellos», ha subrayado el regidor a preguntas de los medios sobre el accidente en la avenida del Ferrocarril en el que una conductora perdió el control del vehículo y volcó. Los nuevos límites de velocidad para vías urbanas y travesías fueron aprobados en el Consejo de Ministros el pasado noviembre.