El Cefot dejará salir a los alumnos de la base durante su estancia para formarse en Cáceres si la situación sanitaria mejora. Así lo confirman este lunes fuentes del acuartelamiento coincidiendo con la llegada de la primera tanda de alumnos del primer ciclo de este año con 1.316 plazas. De esta forma, un año después de implantar un estricto protocolo para seguir recibiendo alumnos, ahora pone sobre la mesa la posibilidad de flexibilizar las medidas en función del avance en las próximas semanas de la tasa de incidencia acumulada en la capital cacereña y del ritmo de vacunación.
De momento, los alumnos que se han incorporado esta semana, 611 hombres y 41 mujeres, mantendrán el mismo protocolo que se implantó en el acuartelamiento desde que arrancó la pandemia. A su llegada, escalonada por horarios para evitar aglomeraciones, todos se sometieron a un test para detectar casos de coronavirus. Más tarde, se incorporaron a la compañía correspondiente y el grupo burbuja en el que convivirán durante su periodo en la base. Tal y como se ha hecho en los dos ciclos anteriores de futuros soldados, la base ha dividido el ciclo en dos turnos y de manera paralela recibirán formación presencial y online para evitar riesgos.
Según informa el Cefot, esta primera tanda se someterá a un proceso de adaptación de dos semanas y regresarán a sus hogares para que el 7 de junio haga efectiva su incorporación el segundo turno con 616 hombres y 47 mujeres. A partir de ahí, irán turnado su presencia en la base hasta completar la fase de formación militar general en julio. En cuanto a la jura de bandera, dependerá también de la evolución de la situación sanitaria si se celebra con público o a puerta cerrada, como en los dos últimos ciclos.