Los pantanos cacereños ofrecen modalidades deportivas que apenas pueden encontrarse en la costa, como ‘e-foil’, que permite volar sobre el agua, o la única tabla de surf eléctrica de los embalses españoles. Y ello gracias a la empresa Panthos, creada por David Pérez y José Ignacio Fernández. Son dos vecinos de Moraleja dedicados durante años al mundo de la vela, que un día se atrevieron a vivir de su gran pasión. Conocedores de todos los pantanos de la provincia, maduraron la idea, incorporaron otras disciplinas y hoy trabajan en los embalses de Valdecañas y Gabriel y Galán, con propuestas innovadoras en la España interior.

Responsables de la gestión náutica de Isla Valdecañas, ya tienen en sus aguas tres barcos de vela con seis metros de eslora, todos adaptados a personas con movilidad reducida. En ellos ofrecen desde paseos hasta escuela de vela (cursos de distinto nivel), e incluso competiciones.

Pero además, Panthos brinda la posibilidad de practicar en Valdecañas paddle surf y de subirse a la primera tabla de surf eléctrica de las aguas interiores del país. «Permite surfear sin la necesidad del empuje de las olas y hacer diferentes trucos, según la habilidad y experiencia que se vaya adquiriendo», describe David Pérez. Este año han incorporado otro ‘juguete’: la ‘e-foil’, una tabla dotada de un ala bajo el agua y de un motor eléctrico, «que hace posible volar sobre la superficie del agua en Extremadura, con velocidades de hasta 35 km/h». Solo existe en Barcelona, Mallorca y Tenerife.

La ‘e-foil’ también se traslada al Gabriel y Galán bajo reserva, donde además la empresa ofrece paddle surf y ‘wakeboard’ (tabla que se desliza con la tracción de un barco). No faltan los paseos en catamarán hasta el Meandro Melero (Hurdes) y Granadilla. Realizan además una navegación nocturna con guiado de estrellas y cena en un restaurante especial. Además, organizan sesiones de ‘team building’ para empresas.

«La provincia de Cáceres ofrece muchísimas opciones, cada lámina de agua tiene su identidad, su contexto y sus posibilidades, pero todavía está todo por explotar, hay una falta de infraestructuras evidente”, subraya David Pérez. Entre las dificultades, destaca las importantes inversiones que se necesitan y los fuertes desniveles de los pantanos, especialmente los destinados a producción eléctrica.