La mesa de contratación de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) ha propuesto adjudicar a las empresas Inyges Consultores y Ambling Ingeniería y Servicios la redacción del proyecto del nuevo trasvase de agua para el abastecimiento a Cáceres. Este nueva conducción, con una captación en el embalse de Alcántara, es la solución de futuro para garantizar el suministro a la ciudad tras el descarte del trasvase desde Portaje.
A esta licitación se presentaron cinco ofertas de consultoras. La propuesta elegida no obtuvo la mejor puntuación en la parte técnica, pero sí en la económica por la baja que ha presentado, que es de un 42,5% respecto al precio base de licitación. La redacción del proyecto salió por un precio de 345.321 euros, la oferta finalmente elegida se compromete a redactarlo por 198.560 euros. Ahora hay un plazo de doce meses para dar una solución técnica que permita conectar el embalse de Alcántara, a la altura del puente de la A-66 que cruza el río Almonte, con el embalse del Guadiloba y la estación de tratamiento de agua que está en la Montaña.
Una vez redactado el proyecto, y si no hay nuevas interrupciones, habrá que sacar a concurso la ejecución de las obras. El coste definitivo tendrá que salir de las condiciones y valoraciones del proyecto.
La nueva estación de captación y bombeo de agua estará junto al puente del Almonte y la conducción tendrá una longitud de 22 kilómetros. Se aprovechará parte de la infraestructura que se instaló cuando se colocaron las tuberías del trasvase de Portaje. Se elige esta ubicación y no otra donde la cota de Alcántara sea incluso más baja para aprovechar esta infraestructura. En el pliego técnico se propone que la conducción llegue directamente hasta la estación potabilizadora de la Montaña para reducir el coste energético y no tener que hacer una nueva impulsión desde el embalse del Guadiloba.
Este trasvase sustituirá al que presta servicio a la ciudad desde agosto de 1992 y que se encuentra aguas arriba, conducción que recientemente se ha mejorado para aumentar su capacidad con el fin de que en los meses de verano se pueda trasvasar más agua que la que se consume.
El trasvase actual puede captar el agua desde la cota 192 dentro del embalse de Alcántara. El nuevo trasvase permitirá bajarlo hasta la 186, con estos seis metros se busca que «la captación de agua no se encuentre condicionada por la explotación hidroeléctrica del embalse de Alcántara», según se explicó desde la Confederación Hidrográfica del Tajo cuando se anunció la licitación del proyecto.
El problema que tiene el trasvase actual es que está condicionado por la explotación hidroeléctrica por parte de Iberdrola, que tiene la concesión de Alcántara. Ha habido años que se ha estado al límite de tener que suspender el trasvase, lo que habría dejado a la ciudad sin su principal fuente de abastecimiento. Esto es lo que se pretende solucionar en unos años con la nueva conducción.
