El presidente de la Cámara de Comercio, Gabriel Álvarez Arroyo, ha abogado por la unidad de todas las organizaciones empresariales para que la recuperación del tejido empresarial de la provincia cacereña y la reconstrucción económica de Extremadura se consiga con todas las garantías de éxito. En este sentido, ha realizado un llamamiento al consenso y al diálogo entre todas las asociaciones, federaciones y colectivos dedicados al desarrollo empresarial de Cáceres, “para que entre todos podamos afrontar los retos y la difícil situación por la que están atravesando muchos sectores de nuestra economía”.  

 Para Álvarez Arroyo la división y los desencuentros “restan la energía y dificultan el trabajo” que todas las organizaciones empresariales deben desarrollar en pro del tejido empresarial de la provincia de Cáceres y de Extremadura.

El presidente cameral recuerda que la realidad del tejido empresarial de la provincia cacereña no es la misma que la de hace años, al igual que tampoco lo es la de las asociaciones y federaciones empresariales, ya que han surgido un importante número de agrupaciones y colectivos de carácter local, comarcal y sectorial que antes no existían, "pero que son también representativas y que actualmente están fuera de los órganos de representación de los empresarios cacereños y extremeños"

 Por ello es fundamental y justo, indica el presidente de la Cámara, buscar el cauce legal necesario para que desde el dialogo y respeto mutuo, todas estas asociaciones y federaciones, de acuerdo a su representatividad, se puedan integrar y formen parte de pleno derecho en los órganos de representación de los empresarios y se trabaje unidos en la defensa los intereses generales y comunes de las empresas cacereñas. 

 Por otra parte, el presidente de la Cámara de Comercio de Cáceres reconoce el “excelente trabajo y labor dentro del diálogo social” mostrado por la Confederación Regional Empresarial Extremeña (Creex), especialmente en este año y medio de pandemia, así como el importante papel que representan las Federaciones Empresariales de Cáceres y Plasencia que durante años han jugado en la defensa de los intereses generales de los empresarios. “Tanto sus presidentes como secretarios generales y directivos de estas organizaciones merecen el máximo respeto y reconocimiento”, apunta.