El concejal de Patrimonio, José Ramón Bello, se ha comprometido a que en agosto quedará definitivamente resuelta la problemática de las terrazas en la plaza Mayor. Tras la denuncia que formularon comerciantes y propietarios de establecimientos hoteleros, el consistorio encargó un informe policial que fue concluyente: no se cumple ni la seguridad ni la accesibilidad. Fue entonces cuando el equipo de gobierno inició un proceso de revocación de las licencias para que los veladores se ajusten a las condiciones que marca la ley. En esta situación se encuentran cinco locales, a los otros dos se les clausuró la terraza porque no habían renovado la licencia.

Así las cosas, se abrió un periodo de alegaciones, al que con todo su derecho acudieron los afectados. Ahora el ayuntamiento las estudia. No obstante, Bello indicó que «la ley es muy garantista y, por tanto, en un plazo de días debemos responder, pero preveo que los argumentos de los hosteleros se desestimarán y tendrán que establecer tanto unos itinerarios adecuados como la reducción del número de mesas». En el caso de los establecimientos a los que se les retiró la terraza, si resuelven los trámites legales podrán reponer el velador. El concejal confió en que los hosteleros acepten la decisión municipal porque, de lo contrario, «llevaremos a cabo una aplicación estricta de la ley», dicho de un modo más claro: «quitaremos las terrazas», zanjó Bello.

No obstante, el dirigente socialista precisó que el ayuntamiento mantuvo un encuentro con los afectados en el que mostraron buena sintonía. «Se prevé que se pueda solucionar para que no vuelvan a producirse problemas de acceso y seguridad», confió el edil.

Veladores en la parte baja de la plaza Mayor de Cáceres. SILVIA SÁNCHEZ FERNÁNDEZ

Santiago Avendaño, que gestiona el Hotel La Boheme, situado en la plaza del Duque aunque con acceso directo desde uno de los callejones de la plaza, es el portavoz de vecinos y comerciantes afectados por la situación de las terrazas. Fueron ellos los que a mediados de junio denunciaron públicamente la celebración de botellones en la parte baja de la ciudadela y los problemas de acceso.

José Ramón Bello, concejal de Patrimonio. SILVIA SÁNCHEZ FERNÁNDEZ

"Los hosteleros tendrán que establecer tanto los itinerarios adecuados como la reducción del número de mesas"

José Ramón Bello - Concejal de Patrimonio

«El tema del botellón está más controlado porque hay mucha presencia policial», admitió, aunque dijo: «solo algún día que hay una fiestecilla suelta». En cuanto al desorden en las terrazas consideró que «siguen estando mal» y avanzó que están preparando un escrito reclamando dos cuestiones, la primera que extiendan los veladores hasta donde les está permitido. «Un negocio no puede colocar la terraza en un lugar donde no cuenta con autorización, por ejemplo, si invade otro negocio o el acceso a una vivienda. Ahora mismo eso está ocurriendo».

Los vecinos afectados dicen que se incumple la ley de acceso y el consistorio también lo corrobora

Piden que se cuide al sector del turismo con un ordenamiento de los veladores en el que todos puedan convivir

El segundo aspecto que piden que se resuelva es que los hosteleros recojan las terrazas. «Llevamos meses solicitándolo. Hay locales que aunque permanezcan cerrados mantienen las terrazas colocadas. La ley también obliga a retirar el mobiliario, sin embargo en muchas ocasiones lo dejan apilado en puntos que impiden el paso o que suponen poco decoro para una zona turísticamente tan transitada». Han solicitado una reunión con el alcalde, Luis Salaya, pero de momento no han recibido respuesta.

Ocupación

En cuanto a la actividad hotelera, Avendaño apuntó que «va bien» y que «la ocupación es alta, aunque a la baja respecto a otros meses de julio anteriores a la pandemia. El responsable de La Boheme precisó que está en torno al 70 u 80. Este establecimiento hotelero cuenta con seis habitaciones y lleva abierto desde hace ocho años. Los afectados reivindican, por tanto, que se cuide al sector del turismo con un ordenamiento de los veladores en el que todos puedan convivir para fomentar el principal motor económico de la capital: el turismo.