La comisión informativa de Urbanismo del ayuntamiento tendrá que dictaminar este jueves sobre el archivo del procedimiento que se inició en el ayuntamiento para la construcción de apartamentos turísticos en la parcela que ocupó la comandancia de la Guardia Civil, entre las calles Margallo y San Justo. La parcela se compró en 2017 por una empresa de Badajoz después de que por parte de la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de la Seguridad del Estado se redujese su precio, llegando a 300.000 euros, muy por debajo de los 2,7 millones de euros en los que estableció su valor en la primera subasta de este inmueble.

El expediente está promovido por Bosch Bru Inversiones, sociedad radicada en Badajoz. El programa de ejecución para actuar en la parcela se presentó en el ayuntamiento en noviembre de 2018. Se estaba tramitando en el consistorio y quedaba pendiente de la subsanación de deficiencias señaladas en los informes de los servicios técnicos del consistorio.

Lo que se hace ahora por parte del representante de la promotora es desistir de su solicitud y pedir la devolución de la cantidad aportada como garantía provisional de las obras de urbanización, se depositaron 11.903 euros. Lo que hará el ayuntamiento es devolver la garantía y archivar el expediente del programa de ejecución.

La parcela donde está la antigua comandancia es uno de los espacios en suelo urbano cuyo desarrollo está recogido en el plan general municipal de urbanismo. Lo que se propone es la reconversión de los antiguos cuarteles de la Guardia Civil y su destino a uso residencial (el número de viviendas orientativo que se propone en el plan general es de 28). Con esta intervención urbanística también se pretende «el esponjamiento en la trama urbana, obteniendo una plaza en el entorno de las edificaciones de interés existentes, que se proponen reutilizar para uso dotacional», según se indica en la ficha del plan general, en la que se propone la ejecución de un aparcamiento bajo la citada plaza. La superficie de la parcela no llega ni a media hectárea (son 3.399 metros cuadrados).

En esta parcela estuvo la comandancia de la Guardia Civil hasta su cierre en el año 2003. La Benemérita decidió abandonar estas instalaciones cuando centralizó la mayor parte de sus servicios en la nueva comandancia que se construyó en la avenida de la Universidad. La primera subasta para su venta alcanzó un precio de 2,7 millones de euros. Fue un procedimiento que quedó desierto y al que siguieron otras subastas hasta que el valor del terreno quedó por debajo de 300.000 euros, un precio que pagó la empresa pacense que en 2017 se quedó con este inmueble.