No sabe, no contesta. Tras la comparecencia que protagonizó este jueves Infinity Lithium para anunciar un cambio en su proyecto inicial y descartar que la extracción se hará a cielo abierto, uno de los puntos más controvertidos de la iniciativa, no hubo respuesta por parte de la corporación municipal. Ni el equipo de Gobierno (PSOE) ni los grupos de la oposición (PP, Ciudadanos y Podemos) quisieron pronunciarse sobre la postura que tomarán al respecto

El propio alcalde, Luis Salaya, representante de los socialistas, rehusó hacer valoraciones al respecto sobre el asunto esa misma jornada. Hasta ahora pesa el precedente de que el ayuntamiento encabezado por Salaya se ha mostrado contrario al proyecto minero de forma tajante y así lo ratificó precisamente el regidor municipal hace una semana cuando asistió al acto de celebración del cuarto aniversario de la plataforma ciudadana contraria a la mina Salvemos la montaña en Cáceres, donde se descubrió una placa y se plantó un olivo en la plaza. De la misma forma descartaron hacer declaraciones los grupos de la oposición. Por su parte, el PP de Rafa Mateos aseguró que no se pronunciará hasta que no tenga acceso a la documentación. En la misma línea manifiesta su postura Consuelo López de Unidas Podemos, que aguardará a consultar los informes aunque sí avanzó que su postura contraria a cualquier modelo de extracción minera es «clara». 

Aunque tampoco muestra un posicionamiento rotundo sobre el asunto, avanza Raquel Preciados, de Ciudadanos, que su valoración definitiva sobre esta modificación de Infinity dependerá «de los informes técnicos». «Si no es una intervención de carácter perjudicial para la ciudad, vamos a apoyarla de la misma manera que cuando hubo que votar la restauración de los caminos y los informes técnicos demostraron que efectivamente existía perjuicio y que jurídicamente había que sancionar, también lo apoyamos», expone.