De la noche al día. La estación de tren de Cáceres ha experimentado tal cambio de imagen que realmente parece nueva. Aunque los remates de las obras continúan en la zona exterior, el vestíbulo ya ha reabierto sus puertas a los viajeros, que se topan con una estancia luminosa, diáfana, con mobiliario de diseño moderno, módulos coloridos y baños adaptados.

Vista del vestíbulo, ahora mucho más diáfano. JOSÉ PEDRO JIMÉNEZ

Los trabajos de remodelación de la estación cuentan con un presupuesto de 5,79 millones de euros y han consistido en la reforma integral del edificio principal y del entorno. La fachada se ha mantenido para preservar la identidad original del edificio, aunque en el vestíbulo se han instalado nuevos acristalamientos que favorecen la entrada de luz natural.

Vista del recinto desde el exterior. JOSÉ PEDRO JIMÉNEZ

También se conservan los murales, ahora más destacados por la mayor luminosidad del recinto. Además se incorpora un espacio de espera conectado con wifi para los viajeros y las personas que puedan venir a recogerlos.

Otra vista del recinto, donde destacan los tonos coloridos sobre fondos blancos. JOSÉ PEDRO JIMÉNEZ

Se han reordenado los accesos y se ha construido una gran plaza de nueva creación que se completará con una zona verde a la entrada de la estación. Asimismo, se ha habilitado un nuevo parking con 128 plazas, la mitad cubiertas, que podrían incrementarse en función de la afluencia.