Son marca Cáceres: profesionales de la tecnología, la publicidad, la información, investigadores, médicos, farmacéuticos, ingenieros... que desarrollan sus quehaceres la mayoría de ellos lejos de la ciudad que les vio nacer y crecer. Sus circunstancias son distintas. Son los mejores en lo suyo. Han llegado a la cima de grandes empresas e instituciones y su retorno es complicado. Quieren trabajar en casa, aunque su desarrollo profesional lo convierte a día de hoy en casi un imposible. Hablamos de talento global, de conocimiento con sello cacereño para el resto del mundo.

Daniel Lozano: «Solo la inversión en investigación será capaz de detener la pandemia del covid que asola a todo el planeta» SILVIA SANCHEZ FERNANDEZ

Algunos viven con la maleta a cuestas. Otros hace tiempo que la tienen guardada en sus destinos de residencia. Es el caso de Daniel Lozano, licenciado en Veterinaria por la Universidad de Extremadura (UEx), tras el doctorado en Madrid estuvo en París, en el CSIC, y ahora se encuentra trabajando en el Hospital Monte Sinaí de Nueva York, donde es experto en alergias alimentarias. Científico en salud humana, sus estudios reveladores sobre el covid-19, a caballo entre Estados Unidos y el Instituto Carlos III de la capital española, le han permitido descubrir la respuesta que generan las células específicas de antígenos en el control de la enfermedad. Lozano está convencido de que «solo la inversión en investigación será capaz de detener la pandemia que asola a todo el planeta. Asimismo, la sociedad no tenía que estar preparada para una carrera de fondo contra el coronavirus, aunque las instituciones, sí».

Cirugía

Lo de Helena Piñas Hormeño, cirujana maxilofacial en el Hospital Regional Universitario de Málaga, riza el rizo. Hizo la enseñanza musical de piano en el Conservatorio y la joven asegura que la música es unas de las mejores terapias para relajarse y que de ella aprendió la disciplina para entrar en un quirófano. Triunfa en uno de los campos más desconocidos de la sanidad española, aunque muy necesario especialmente para enfermos oncológicos. Piñas ha conseguido llegar a los más alto subiendo una enorme montaña llena de ganas, de paciencia, de mucho trabajo duro y de persistencia.

Helena Piñas: «La música es unas de las mejores terapias para relajarse y me enseñó la doctrina para poder entrar en un quirófano» EL PERIÓDICO

La historia de Daniel Gil Ramos está escrita a base de esfuerzo, dedicación, aprender idiomas y un talento innato. Cursó Publicidad y Relaciones Públicas en la Universidad Complutense de Madrid, así como un máster en Comunicación, en esta misma facultad. Ahí comenzaría a esculpirse el joven publicista que ficharía por Google Irlanda hace cuatro años y medio. La clave ganadora de su educación, opina, ha sido que sus padres «no nos obligaron ni a mí ni a ninguno de mis dos hermanos (Víctor y Rocío) a nada, aunque nos animaban a todo». Él es gestor de cuentas publicitarias y dirige junto a tres compañeros el equipo comercial para esta firma en Portugal. Su trabajo consiste en asesorar a pymes y multinacionales (Carrefour, El Corte Inglés, MediaMarkt...) que invierten en los formatos publicitarios del gigante tecnológico para que vendan más. «Estoy viviendo una experiencia increíble y preciosa», destaca Gil.

Daniel Gil Ramos: «Mis padres no nos obligaron ni a mí ni a ninguno de mis dos hermanos (Víctor y Rocío) a nada, aunque nos animaban a todo» EL PERIÓDICO

«Soy creativa, ambiciosa, siempre he podido elegir mi camino y eso es un triunfo». Así se define la periodista Flor Amarilla. Ha viajado por México, Francia o Kenia, una experiencia que le sirvió para crear una oenegé que hoy entrega becas de formación a niños y jóvenes. De sus prácticas en SER Cáceres dio el salto a ‘La Ventana’, luego estuvo en ‘Anda Ya’, ahora se encuentra en ‘Hoy por hoy’ a nivel nacional, programa capitaneado por Àngels Barceló. Ella confía en que la epidemia acabará, que la fatiga pasa factura y que Alberto, su hermano actor, es un maravilloso pez que mejora las aguas del mar.

Flor Amarilla: «Soy ambiciosa, creativa, siempre he podido elegir mi camino y eso es un triunfo. El virus terminará pero la fatiga pasa factura»

Flor Amarilla: «Soy ambiciosa, creativa, siempre he podido elegir mi camino y eso es un triunfo. El virus terminará pero la fatiga pasa factura» EL PERIÓDICO

«Una vida no vale más que otra, por eso hay que vacunar según los protocolos», indica de forma contundente el farmacéutico del Estado Luis Manuel Osorio Padilla. Con 18 años se fue a Salamanca a estudiar la carrera de Farmacia, la profesión de su madre y por la que él sintió auténtica motivación y entusiasmo. Un año y medio después de empezar a prepararse la oposición se convirtió en uno de los profesionales más jóvenes de su gremio en España. «Elegí Sevilla y el día a día es estupendo, porque te dedicas a una cosa distinta, uno estás en un laboratorio analizando sustancias, otro estás en el aeropuerto verificando que la mercancía que entra puede pasar al territorio de la UE... Sobre todo con el coronavirus hemos tenido muchísimo trabajo en este punto con las mascarillas quirúrgicas, los productos hidroalcohólicos... para evitar falsificaciones. Ha sido una labor inmensa pero bonita porque sentías que estabas aportando a la sociedad tu granito de arena», asevera Osorio con una gran sonrisa.

Luis Manuel Osorio Padilla: «Hemos hecho una inmensa labor pero muy bonita porque sentías que estabas aportando a la sociedad» EL PERIÓDICO

En la luna

No hay extremeños en la Luna, pero sí un cacereño que trabaja en el diseño de infraestructuras para que un asentamiento en el astro, a largo plazo, sea viable. Miguel Cordero Álvarez, ingeniero mecánico (Universidad Politécnica de Madrid), junto a su socio segoviano de trabajo Ayim Manuel de la Fuente, decidieron competir en un concurso a nivel internacional de la NASA (Lunar Torch). El reto planteado: idear un heliostato (una especie de espejo) móvil acoplado a un vehículo lunar para ser transportado a el astro, en un espacio reducido y, una vez allí, desplegarse hasta alcanzar una superficie reflectante de 10 metros cuadrados. La conclusión que plantearon estos jóvenes les hizo ganar la prestigiosa prueba con un premio de 3.000 dólares. «Proyectamos un aparato que se utilizará dentro del programa Artemis, cuya finalidad es establecer una presencia sostenible en el satélite para iluminar objetivos, reducir gradientes térmicos, calentar objetos o servir de baliza de aterrizaje...», manifiesta Cordero lleno de alegría y orgullo.

Miguel Cordero: «Proyectamos un aparato cuyo fin es establecer una presencia sostenible en la luna para iluminar varios objetivos» EL PERIÓDICO

«Salvar vidas es algo increíble. Yo no lo llamaría solo trabajo. Estudié Medicina en la Universidad Autónoma de Madrid y decidí quedarme aquí porque iba a encontrar más oportunidades formativas y laborales», asevera Rodrigo Arroyo Fernández. Por esta razón determinó hacer su residencia (segundo año) en el servicio de cirugía torácica del Hospital Universitario Fundación Jiménez Díaz, en la capital de España. Arroyo se forma junto al robot Da Vinci y afirma que «la cirugía robótica es el futuro» y que «la máquina hace que las operaciones ganen en precisión, visualización y seguridad».

Rodrigo Arroyo: «La cirugía robótica es el futuro. El robot Da Vinci hace que las operaciones ganen en seguridad, precisión y visión» EL PERIÓDICO

Javier González es una persona brillante, intelectualmente admirable, que extrajo como pocos la esencia del Derecho en su paso por la Universidad de Extremadura. Renunció ayer para ganar hoy, y con tan sólo 23 años se convirtió en uno de los fiscales más jóvenes de nuestro país, puesto que actualmente ocupa en Barcelona. González expresa que sus padres son su bandera y que «la juventud es el futuro del mundo». Un servidor público de primer orden: comprometido, valiente, justo, responsable, fiel a los principios que sostienen la función pública española que tanta confianza proporcionan y tanta seguridad transmiten: proteger los intereses generales y el bien común de los ciudadanos.

Javier González: «Debemos proteger los intereses generales y el bien común de todos los ciudadanos de nuestro país» EL PERIÓDICO

Ocho talentos cacereños que fuera de su ciudad natal se ganan la vida en lo que les gusta, labran un futuro brillante y llevan el nombre de Cáceres a lo más alto.