El pleno del ayuntamiento aprobó el jueves la elaboración de una ordenanza reguladora de los alojamientos turísticos extrahoteleros (apartamentos turísticos) de Cáceres. Fue un acuerdo que se adoptó por unanimidad y que se toma cuando los datos mensuales del Ine sobre las pernoctaciones y la afluencia de turistas superan a los de los meses de años anteriores a la pandemia. Cáceres cuenta con 262 alojamientos turísticos con más de un millar de plazas que ya suponen «el 20% de todas las pernoctaciones», según el dato que se ofreció en el debate en el pleno.

No se entró durante el debate en qué aspectos se regularán, ni siquiera dos de los expuestos por el sector:el cobro de la tasa de recogida de basura, en la que el ayuntamiento tiene competencia, y el valor catastral, en el que el consistorio no es competente, marca un tipo, pero no aplica ningún recargo específico para estos establecimientos. En la tasa lo que pide el sector es que tengan un tratamiento de vivienda y no de hostales y pensiones y que paguen menos de diez euros en vez de veinticinco. Pero este cambio no requiere una nueva ordenanza, sino modificar la fiscal de recogida de residuos sólidos con la justificación de por qué se le da un tratamiento de vivienda a los alojamientos turísticos.

Hay 262 alojamientos turísticos, según los datos del Instituto Nacional de Estadística de 2021, una cifra muy por encima de los 51 que aparecen en la memoria de la revisión del plan especial (la norma que regula las intervenciones urbanísticas en el casco viejo, una herramienta idónea para regular estos establecimientos y que, sin embargo, lleva un retraso considerable para su aprobación), y es el doble de los que figuran en el estudio que sobre los apartamentos turísticos realizaron, entre otros, los profesores universitarios Juan Ignacio Rengifo, Antonio Campesino y José Carlos Salcedo, un estudio con datos de hasta el año 2019 y que resaltaba el efecto beneficioso que los apartamentos turísticos habían tenido en la rehabilitación del patrimonio construido dentro del área del conjunto histórico.

En el estudio se cifraba en 132 los apartamentos turísticos con 608 plazas. Actualmente, según los datos dados por el sector en Cáceres, son los 262 alojamientos citados con una oferta de más de un millar de plazas. Pues ahora el ayuntamiento tiene que regular este sector, que con esa oferta ha pasado a ser uno de los más importantes de una ciudad que tiene en el turismo uno de sus principales motores de desarrollo.

El ayuntamiento tiene herramientas suficientes: la ley de turismo de Extremadura, que desde 2011 ya regula los alojamientos turísticos extrahoteleros, su plan general municipal de urbanismo, que permite que en los usos residenciales se puedan establecer como compatibles utilidades hoteleras, aunque con limitaciones, y el plan especial cuando ya esté su revisión. Además está la sentencia del Supremo que avala un acuerdo que adoptó el pleno del Ayuntamiento de Bilbao de que los alojamientos turísticos deben tener un uso urbanístico de equipamiento, no vale solo el uso residencial.

Tendrá que ser una regulación que no sea restrictiva, en el debate del pleno se aseguró que aún hay margen para más alojamientos, pero que dificulte que en un futuro la parte antigua se transforme en un decorado por el que solo transiten turistas y sin apenas residentes. La asociación de vecinos ya ha alertado del riesgo de gentrificación, ese peligro de que al final los vecinos sean solo figurantes.