Jorge Andújar preside la Asociación Extremeña de Comercios Turísticos, Aexcotur, un colectivo del que forman parte tiendas de souvenirs, alimentación, distribuidores, mayoristas y fabricantes. Está formada por 30 empresas de Extremadura que se unieron el año pasado a raíz de la pandemia con la intención de exigir a la Junta ser reconocidos como empresarios del sector turístico, una categoría de la que carecen porque a juicio de la administración ellos son o tiendas de regalos, o supermercados o ferreterías o tiendas de adornos.

Existe, evidentemente, una especie de vacío legal en el sector. Lo explica Andújar cuando personaliza en su caso: «He sufrido directamente el confinamiento y los cierres perimetrales, y en esas etapas he tenido pérdidas del 90% en la facturación. Eso significa que el 90% de mis clientes son turistas».

En mayo pasado, Aexcotur contactó con la Dirección General de Turismo porque su objetivo es tener los mismos derechos que empresas de guías, hoteles, intermediarios, balnearios... «Nosotros no estamos ahí y estar significaría, por ejemplo, podar optar a las ayudas que se conceden».

Andújar defiende que ellos «son también imagen de la ciudad. Mucha gente entra en nuestras tiendas a comprar, por ejemplo, imanes para la nevera y eso supone promoción. Conectamos con los clientes, perfeccionamos nuestro nivel de inglés. Nosotros contribuimos a hacer de Cáceres una ciudad turística y hacemos hasta de punto de información».

La asociación ha mantenido un encuentro con el portavoz de Turismo del Grupo Parlamentario Popular, Juan Parejo, que llevará su problemática a la Asamblea registrando una iniciativa. En próximos días también se reunirán con Ciudadanos y Podemos.

Los afectados hablan de asfixia económica. El covid ha mermado sus negocios hasta tal punto de que muchos se han visto obligados a reducir su personal o a cerrar directamente. Jorge Andújar es licenciado en Márketing. Emprendedor donde los haya, comenzó en Bluster Video (avenida de Portugal) en 1993. En 2015 abrió junto a Torre de Sande su primera tienda de souvenirs y luego otra en la plaza. Las cerró por la pandemia. En Pintores lleva desde 2017