El mal funcionamiento de las arquetas del área de Urgencias del hospital Universitario de Cáceres provoca atascos de aguas fecales y malos olores en algunas de las dependencias del complejo. Los celadores han puesto la voz de alarma, ya que uno de los espacios afectados es el despacho en el que ellos se ubican (allí es donde reciben las llamadas de las diferentes áreas para reclamar sus servicios). La situación es tal que ayer llegó incluso a rebosar una de esas arquetas en el despacho de la jefa de admisión, que se llenó de aguas residuales. El olor era «insoportable».

No es algo nuevo, sino que esta problemática llevan arrastrándola, según cuenta uno de los afectados a este diario (trabajador del centro hospitalario) desde que abriera el hospital. Ha sido incluso necesario precintar un váter del departamento destinado a los celadores para evitar que hubiera más atascos. Y la única solución que ofrece Sanidad es desatascar los desagües, pero a los pocos días vuelven a llenarse de nuevo. Ellos demandan que se ponga fin al problema porque no soportan más el olor. «Queremos que lo arreglen porque no podemos estar así. Los aseos huelen fatal, no solo los nuestros, sino también los de los pacientes», afirma este afectado. Los que peor parte se llevan son un servicio ubicado en la zona de triaje y que utilizan tanto los pacientes como sus familiares y otro destinado a minusválidos. «Desde mantenimiento nos dicen que las arquetas no están bien construidas y que, o se soluciona el problema de raíz o vamos a seguir así siempre», insiste.