El presupuesto del ayuntamiento para este ejercicio asciende a 75 millones de euros, según se recoge en el anteproyecto de las cuentas locales que este martes aparecerá en la web del ayuntamiento, en el apartado de los presupuestos participativos, una publicación con la que se inicia su tramitación. Son cuatro millones menos que en 2021, cuando fueron 78,9 millones. La causa de esta reducción se debe a que este año no se contrata una nueva operación de crédito para sufragar inversiones, no se repite esa previsión de ingresos de 8 millones de euros que tenía reflejo en el gasto, en el capítulo de inversiones.
Este recorte es solo el análisis superficial de las cuentas. Si se entra en el fondo, estamos ante un presupuesto en el que se incrementan todos los capítulos, salvo el de inversiones -en los gastos- y el del pasivo financiero (operaciones de crédito) -en los ingresos-. Ese aumento, que en algunos casos es significativo, hace que la diferencia entre 2021 y 2022 no sea mayor.
En el apartado de los gastos destaca primero el incremento que se produce en el capítulo de personal, que pasa de 29 a 31,2 millones de euros, también aumenta en casi un millón de euros el gasto en bienes y servicios, que para este año ascenderá a 26,1 millones. Esto hace que los gastos corrientes del ayuntamiento, los que permiten el funcionamiento de la entidad local y que preste servicios, suban en tres millones de euros.
¿Cómo se financia este aumento del gasto corriente? Con un incremento de los ingresos corrientes de más de 4,5 millones de euros, que es en parte resultado de las dos subidas tributarias que se aplicarán en 2022:la del IBI y la del impuesto de circulación. Este crecimiento de los ingresos corrientes -los que salen de impuestos, tasas y transferencias de otros organismos (principalmente del Estado)- permitirá no solo afrontar todos los gastos corrientes, sino además las amortizaciones de las operaciones de crédito correspondientes a este año y también parte de los 2,1 millones del capítulo de inversiones previsto para este ejercicio.
Así la recaudación por el IBI urbano se incrementa en 2,5 millones de euros, mientras que en el impuesto de circulación ese aumento es de medio millón de euros, además se produce otra subida de 2,5 millones de euros en la aportación que hace el Estado con cargo al fondo complementario de financiación que recibe el ayuntamiento. Del IBI urbano se espera generar una recaudación de 25,1 millones frente a los 22,6 que se presupuestaron en 2021; del impuesto de circulación se prevén unos ingresos de 4.609.660 euros, en 2021 fueron 4.162.000;y del fondo complementario se planean recibir 18,4 millones, hace un año se presupuestaron 15,7. Los ingresos por el impuesto de construcciones, que en 2020 permitió al ayuntamiento cuadrar las cuentas por el efecto de las fotovoltaicas, se reducen y bajan hasta los 1,8 millones.
A la exposición a partir de hoy tendrán que seguir los debates de las cuentas en las comisiones informativas que se celebren y en los contactos por parte del gobierno con otros grupos para tener los votos suficientes para sacar las cuentas.
