La eficiencia energética llega a la estación de autobuses, donde un muro verde (como se denomina en bioconstrucción a una instalación vegetal vertical) ayudará a regular la temperatura del edificio y a aumentar su aislamiento térmico y acústico. Es una de las actuaciones que prevé la Junta de Extremadura para conseguir que este espacio sea más sostenible. Ha sacado a concurso la actuación por 172.188 euros, pero ha quedado desierto. Ahora, según informa la Consejería de Movilidad, Transporte y Vivienda, se realizará un procedimiento de negociado sin publicidad, a través del que invitará directamente a las empresas a que se presenten a la licitación.

El objetivo de la actuación es contribuir a la descarbonización (reducción de las emisiones de carbono, sobre todo de dióxido de carbono) de la estación para «prestar un mayor confort» a los usuarios de la misma. Se actuará también en la fachada con orientación sur, sobre la que se construirá un muro de bloque de tierra comprimida y de vidrio.

Las dos nuevas fachadas, concreta el Ejecutivo autonómico, presentan la ventaja de regular, de manera natural, el ambiente del espacio interior. Además, para ayudar precisamente en ese aislamiento térmico, se sustituirán las carpinterías actuales por unas de aluminio con rotura de puente térmico abatibles y en la cubierta se colocará un aislamiento térmico de paneles de corcho expandido. La idea es que una vez finalizadas las obras (cuando se adjudiquen y se ejecuten) se pueda monitorizar el proyecto con la finalidad de comparar los resultados alcanzados. El proyecto se suma a las recientes mejoras realizadas en el acceso a los vehículos.