La mercantil Extremadura New Energies (ENE) asegura que el proyecto de la mina a cielo abierto en Cáceres está “enterrado y descartado", y que ya tiene preparado el nuevo proyecto de extracción subterránea cien por cien, "sin impacto visual, sin ruido ni polvo, sin emisiones, sin vibraciones e in vertido. El consejero delegado de la compañía, Ramón Jiménez, calcula que, “si va todo bien”, una vez sea presentado este nuevo proyecto junto con el de la planta de transformación de litio en hidróxido de litio, a finales de 2025 esperan producir la primera tonelada.

El responsable ha explicado que el punto más alto de extracción está a 40 metros por debajo del suelo, “por lo que la superficie del valle no se verá afectada en ningún caso”. Las emisiones de CO2 serán "cero”, ya que se utilizará maquinaria eléctrica o alimentada por hidrógeno verde. "No tocamos el Calerizo y el agua que se utilizará --siempre en circuito cerrado-- procederá de la estación depuradora de aguas residuales de la ciudad", detalla el consejero delegado en una entrevista con la agencia Efe.

Agrega que la planta de transformado, que sería la primera de Europa, es la que da valor añadido al proyecto. “Transformamos un material cuya tonelada vale 1.000 euros en un material que actualmente vale 80.000 euros", si bien este último precio, "si no hubiera guerra en Ucrania", estaría en 35.000 euros.

La mercantil estima que la inversión necesaria para la planta de transformado asciende a 500 millones de euros, mientras que la de la mina subterránea es de 100 millones. En materia de empleo, la primera generaría 450 puesto de trabajo y la segunda unos 250.

"Son 700 empleos durante 30 años y con salarios medios que doblan la cifra media de los actuales en la ciudad", ha manifestado Jiménez, quien ha querido destacar otro de los ejes de este proyecto: el aspecto formativo. Además, la construcción como tal del proyecto supondrá 1.500 empleos directos.

"Queremos que Cáceres sea un centro de referencia en la enseñanza en torno al hidrógeno verde y almacenamiento energético". Para ello, ENE ya prepara cursos de formación especializada a través del Instituto Europeo de Innovación y Tecnología, organismo dependiente de la UE de estructura público-privada (InnoEnergy), y mantiene conversaciones con la Universidad de Extremadura.

Vía judicial

Aunque sigue abierta la vía jurídica del proyecto de mina de cielo abierto, cuya resolución se espera para finales de este año, según estimaciones de EFE, la mercantil ha decidido "desecharlo", si bien afirma que no puede cerrar dicho procedimiento por la vinculación que éste puede tener con la solicitud como tal de la extracción del litio y el permiso de investigación.

"Si retiramos ese permiso de investigación, las alegaciones planteadas podría afectar a los trámites del nuevo proyecto. Tenemos y queremos presentar este oficialmente cuando haya una resolución de las acciones judiciales actuales", ha insistido.

La UE no pretende importar litio

Ramón Jiménez también ha expuesto que el propósito de la UE es que "no se importe hidróxido de litio --necesario para las baterías-- de fuera de Europa", atendiendo a la política de reducción tanto de la huella de carbono como de dependencia del exterior.

"La intención de la UE --ha reiterado-- es que no se importe el hidróxido de litio tanto por la huella de carbono" que deja el transporte del material, principalmente de China, y "por no tener un control de cómo se produce dicho hidróxido de litio" en origen.

"Lo lógico y lo razonable para minimizar esa huella de carbono es que el citado hidróxido de litio se consuma --por parte de las empresas fabricantes de baterías-- de las zonas más cercanas", ha expuesto el consejero.

Con todo ello, según ha manifestado Jiménez, "tenemos la sensación de que la ciudad de Cáceres está virando a favor de este nuevo proyecto".