La policía busca a los autores de los incendios de la última semana en Cáceres. Según confirmaron a este diario este jueves tanto Policía Local como Policía Nacional, la hipótesis principal que se maneja sobre los fuegos que se han sucedido en la última semana, algunos simultáneos y con varios focos, hayan sido intencionados y, por tanto, se ha abierto una investigación para dilucidar si los incidentes guardan una relación entre sí y si han podido ser causados por las mismas personas.
En lo que va de semana, los bomberos han atendido al menos una decena de incidencias, todas en el perímetro del entorno urbano y en terrenos de pasto. En ninguno de los casos ha revestido gravedad para los vecinos de la ciudad pero alguno de ellos, sí ha generado alarma por la cercanía a zonas residenciales. Precisamente, el que más alerta suscitó fue el que se produjo este pasado martes en una parcela junto al parque del Príncipe y a la residencia de mayores Ciudad Jardín.
Las llamas se quedaron a escasos metros del centro aunque afortunadamente el camino de tierra y un muro ejercieron de cortafuegos y la rapidez de la actuación de los servicios de extinción de Sepei e Infoex evitaron que se agravara. De la misma forma, los bomberos confirman ha atendido otras tantas llamadas desde el pasado fin de semana en Castellanos, un terreno junto al estadio Príncipe Felipe, la Ribera del Marco, Macondo, Mejostilla, residencial Universidad y Paseo Alto, entre otros.
En cuanto al perfil de todos los fuegos, coincide en que han calcinado una superficie controlada de pastos, prácticamente todos se encuentran en una zona de fácil acceso y han podido ser extinguidos en cuestión de minutos. Solo algunos, como el del Parque del Príncipe, contaron con varios focos de origen, uno de los factores que ha hecho sospechar que hayan podido ser intencionados.
Por su parte, la Policía Local asegura que este es el protocolo que se sigue habitualmente y reitera que «siempre que hay varios incendios seguidos se indaga sobre la posibilidad de que sea un pirómano». La Policía Nacional también confirma sin entrar en detalles también que el asunto «se está investigando».
Aunque los bomberos solo tienen competencia para la extinción comparten de la misma forma la sospecha de que los fuegos hayan sido provocados. «Evidentemente solos no se han producido», apuntan. En ese sentido, precisan que «las altas temperaturas de la última semana favorecen que se propaguen más rápido» pero sostienen que el origen intervienen habitualmente factores externos. Deja por tanto esta primera semana de julio un reguero de incendios tras junio, otro mes negro en el que tuvo lugar el fuego del Cerro de los Pinos, una zona que se calcina cada año.
En relación a este asunto y a la posibilidad de que los fuegos guarden relación entre sí, la capital vivió una situación similar hace cuatro años cuando un pirómano provocó catorce incendios, once de ellos en la ciudad y fue detenido. Tras el juicio en la Audiencia Provincial en 2019, fue condenado a cuatro años de cárcel.
