El barrio de Llopis Iborra de Cáceres es el lugar que alberga la primera manifestación de vida humana en la ciudad de Cáceres, ya que en él se encuentra la cueva de Maltravieso donde aparecieron, según los expertos, unas de las pinturas rupestres más antiguas del mundo. Es un entorno privilegiado porque ofrece muchas posibilidades al estar ubicado en una zona cercana a la Ribera del Marco. Este enclave cacereño es muy valorado al existir mucha riqueza alrededor del agua que aporta la mencionada ribera y es gracias a ella por la que se produjo un asentamiento humano en Cáceres, ya que sin agua, no puede desarrollarse la vida humana.

Por todos estos privilegios que tiene la zona, los vecinos del barrio Llopis Iborra – Espíritu santo, denuncian el estado de abandono en el que se encuentra la zona en la que viven, que a pesar de ser uno de los lugares más importantes de la ciudad junto con el conjunto monumental, se denota un tanto olvidado por parte de las instituciones municipales.

Denuncia vecinal

José Antonio Ayuso, presidente de la agrupación vecinal de Cáceres, declara a este periódico que ha sido gracias a la asociación de vecinos del barrio por la que se han hecho la mayoría de mejoras en el entorno de la cueva. Cuenta que hace unos años se producían múltiples problemas de saneamiento en el monumento arqueológico por el sencillo motivo de que las tuberías de desagüe se encontraban canalizadas bajo la misma y cuando estas se colapsaban vertían los residuos, inundando así, el conjunto arqueológico. “Visto que nadie hacía nada, la asociación de vecinos no pudo hacer otra cosa que denunciar esta situación repetidas veces para que el ayuntamiento arreglara este problema que estaba poniendo en serio peligro las pinturas rupestres”.

Del mismo modo explica que el centro de interpretación que se construyó para reproducir el interior de la cueva, “estaba hecho una pena” y fue de nuevo, gracias a la asociación de vecinos, por la que se acometieron una serie de obras que mejoraron, sin duda, el aspecto del centro, olvidado de nuevo por la corporación municipal. “La mayoría de cosas que se hacen son porque las respectivas asociaciones de vecinos están todo el día insistiendo en el Ayuntamiento, si no fuera por nosotros, no se harían la mitad de las cosas”, concluye.

Homenaje

Asimismo, Ayuso comenta el homenaje que, mañana jueves se va a realizar en honor a los descubridores de la cueva, porque no fueron investigadores, sino tres niños nacidos y criados en el barrio del Espíritu Santo, los que dieron la voz de alarma al ver dentro de la cavidad una serie de manos y pinturas que representaban animales. Fue a partir de este momento cuando empezaron las investigaciones que han puesto en valor uno de los monumentos arqueológicos más antiguos del mundo. Por eso se quiere realizar un acto de agradecimiento en honor de estos tres hermanos. Aunque recalca que la propia asociación, en la fiesta del barrio que hace cada año reconoce y agradece la labor de algunos de sus vecinos que no cesan de velar y trabajar por el bien y el desarrollo de la zona. “Este año hemos agradecido su labor al personal de la casa de la cultura y al jardinero que cuida el entorno de la cueva de Maltravieso.

Lo que estos vecinos piden y a la vez denuncian es un mayor desarrollo de la zona. “Aunque quedan muchas cosas por hacer queremos que se visibilice y cuide de mejores formas el entorno en el que vivimos, el barrio está olvidado y parece que si nosotros no luchamos por él, nadie hace nada. El 90% de los cacereños no sabe dónde está la cueva y esto no debería ser así, ya que es un monumento más de la ciudad y se denota claramente que no se está dando a conocer lo suficiente. La cueva no se valora, seguro que si estuviera cerca o dentro de la ciudad monumental, el valor de la cueva y sus cuidados serían mucho mayores de los que actualmente recibe, pero al estar alejada de todo aquello que interesa, cada día está más abandonada”, sentencia.