El Palacio de los Golfines fue ayer testigo de la segunda edición del seminario Extremadura Regional 'Post Covid Business adaptations', al que asistieron representantes de países europeos para conocer los planes de energía verde y economía circular que se lleva a cabo en la región y poder compartir así proyectos de cooperación que mejoren las pautas hasta ahora seguidas.

La directora general de Trabajo, Sandra Pacheco, presentó el acto junto a Andrés Licerán, concejal de Fomento e Infraestructuras, en representación del ayuntamiento. Mostraron las transformaciones que lleva presenciando Cáceres a consecuencia de la pandemia y ante las cuales, detallaba Licerán, «se han abierto puertas con las que llevábamos décadas soñando» y que han permitido, hasta ahora, poder dinamizar la economía, siendo la ciudad a la que mayores cantidades de fondos europeos se han destinado para su desarrollo.  

"Nuestra comunidad ha sido durante años una de las grandes olvidadas, pero no ha mirado nunca a otro lado ante las oportunidades de expansión como las que se están presentando ahora". Sandra Pacheco prestó atención en su intervención a la Ley de Responsabilidad Social para mostrar la tendencia de hábitos en la que Extremadura fue pionera.

«Se han abierto puertas con las que llevábamos décadas soñando»

Andrés Licerán - Concejalía de Fomento, Infraestructuras, Servicios Públicos, Recursos Humanos y Deportes

Energía verde 

Están usando dos herramientas para conseguir la sostenibilidad en Extremadura. Una de ellas la presentó Samuel Ruiz, director general de Industria, Energía y Minas de la Junta de Extremadura, basada en el 'Plan Extremeño Integrado de Energía y Clima'. 

No existe, para él, discrepancias en la integración de las energías renovables con la biodiversidad del medio rural, pues aunar estos dos aspectos de una forma respetuosa traerá prosperidad generando puestos de empleo, una energía más limpia y combatirá la despoblación por ser en estas zonas donde se llevará a cabo el programa de transición energética en un 70% del total. 

«Tenemos que avanzar hacia las energías renovables a la velocidad de la luz», decía Ruiz. «En Extremadura lo estamos haciendo, hemos sabido ver una ocasión única para crear nicho de empleo y atraer iniciativas empresariales». Pretenden aprovechar el espacio de tejados, por ejemplo, para usar panales fotovoltaicos, incentivar los vehículos eléctricos, el almacenamiento energético y la rehabilitación equipos de antiguos. Se esperan así resultados a largo plazo de crecimiento del PIB, mayor recaudación fiscal y subidas de las rentas en hogares.

Plan 2030

La segunda herramienta es el proyecto Extremadura 2030 y la estrategia de economía verde y circular, explicada por el coordinador de Acción Local de la Junta de Extremadura, Santos Jorna. Este plan entiende la economía verde como motor de crecimiento y sostenibilidad, siendo esa que «produce bajas emisiones de carbono y usa los recursos eficientemente». El coordinador aspira a que a raíz de esta forma de empresas, se pueda prosperar en la repoblación y la transición energética. 

A través del acuerdo europeo interregional entre Portugal y España ha surgido LOCAL-CIR, en promoción del emprendimiento e innovación de empresas en la economía circular. 

Ha logrado la integración de itinerarios verdes, un servicio de apoyo permanente y circuitos cerrados de empresas que cooperan en la optimización de recursos con la plataforma Simbiótica, una web que permitirá poner en contacto a empresas que trabajarán en un circuito cerrado; los deshechos de una, se convertirán en la materia prima de otras. 

Lo que pretenden es impulsar la región, logrando así riqueza, empleo verde y hacer frente a los retos demográficos. Aunque Extremadura no ha tenido el desarrollo industrial que grandes urbes, hay que mirar al futuro, porque, como ha recalcado Santos Jorna, «las ciudades son el extrarradio de los pueblos», pues dependen de las zonas rurales por su campo.