El Ayuntamiento de Cáceres ya ha tomado medidas para acatar el real decreto que obliga a apagar los edificios públicos durante la noche a partir de hoy, como medida de ahorro energético. El casco histórico cacereño sufrirá las consecuencias de esta medida, ya que la iluminación ornamental se verá reducida de manera notable.

Actualmente, la ciudad antigua permanece iluminada hasta las 2.30 horas de la madrugada; a partir de ahora, durante el verano, el casco histórico se apagará a la una de la madrugada; en otoño y primavera, hasta medianoche; y en invierno se reducirá hasta las 23.00 horas.

“Desde el Consorcio Cáceres Ciudad Histórica nos trasladan que con esto podremos ahorrar en torno a un 38% del gasto energético”, asegura la alcaldesa en funciones, María José Pulido

Preguntada acerca de las posibles consecuencias que podría tener para el turismo, Pulido cree que esta decisión no afectará al sector porque “los visitantes son conscientes de que hay que cumplir con estas normas y que el ahorro energético es una cuestión de necesidad y la gente lo comprende. Es una hora prudente para permitir al casco histórico lucirse en horario nocturno y que los turistas puedan sacar fotos”.

Pulido ha recalcado que el ahorro energético “ya no es una cuestión de ahorro económico sino de necesidad clara, y la ciudadanía lo comprende”. Y que la ciudad monumental es una zona “que se podrá seguir disfrutando con la iluminación de las calles”.

En cuanto a los edificios municipales, Pulido asevera que se cerrarán y apagarán “en cuanto se termine la actividad; no se prolongará la iluminación de esos inmuebles como se hacía hasta ahora”. Excepto en casos donde se mantenga la actividad, como el albergue de Valhondo y el parque contiguo. 

Las pistas polideportivas se mantendrán abiertas en horario estival hasta las 23.30 horas, cuando se procederá al cierre y se apagarán todas las luces. El horario de invierno no se ha concretado aún.

Ahorro estacional

En primavera y verano, el alumbrado actual funciona 5 horas de media; en otoño e invierno, durante 8 horas y 15 minutos. Por tanto, se produciría un “ahorro porcentual demostrable” del 30% en verano, 50% en primavera, 30% en otoño y de un 42% en invierno; lo que representa un ahorro anual del 38% de media.

También ha recordado Pulido que el cambio a LED puesto en marcha por el ayuntamiento “lleva ahorrando energía desde el año 2016, en una cantidad muy superior al 50%”.