“En 16 años este es el mayor destrozo que hemos sufrido en los balcones”, afirma María Hurtado, residente en la calle Tenerías del casco histórico cacereño, en la confluencia con Caleros, que lleva aguantando mucho tiempo la falta de sentido común y de una señalización correcta para evitar que camiones de reparto, autocaravanas de grandes dimensiones e incluso algún vehículo de la contrata del servicio de limpieza (Conyser) se adentren en las estrechas vías de la zona y terminen causando un perjuicio en las viviendas de particulares. 

La última vez, a finales de agosto, un camión de reparto de agua se quedó atascado en la calle y arrampló con parte del balcón del inmueble. “Al venir a vivir a esta zona tuve que cambiar el basamento original de los balcones por uno de hormigón, más resistente a los golpes. Aun así, cada dos por tres estamos dando parte al seguro por los destrozos ocasionados”. Un perjucio que llevan años denunciando al Ayuntamiento de Cáceres, durante varias legislaturas, y que no solo no se ha solucionado sino que va a peor.

“Desde que eliminaron los pivotes” por el nuevo sistema de acceso al casco histórico (controlado por cámaras) “no hay freno para algunos conductores”, pese a la señal de limitación de altura “que no respeta nadie”.

Por eso, los residentes solicitan al consistorio la instalación de un gálibo que suponga un elemento disuasorio para los conductores de vehículos de grandes dimensiones. “Las casas de los vecinos en los cascos históricos también forman parte del paisaje patrimonial. Patrimonio que mantenemos y rehabilitamos con muchas dificultades y trabas burocráticas”, sostiene Hurtado, quien afirma que el gobierno local ya se ha puesto en contacto para fijar una reunión el próximo lunes con los afectados.

Camión atorado que provocó el destrozo. CEDIDA

Camión de reparto de agua en Tenerías. CEDIDA

Durante el rodaje de la exitosa “La Casa del Dragón”, el colectivo vecinal denunció destrozos en el pavimento y en los muros debido a la amplitud de la maquinaria utilizada para esta superproducción.