Los cacereños realizan 117.500 trayectos diarios en vehículos privados para trabajar, estudiar, comprar u otros motivos. Son datos recogidos en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PIMUS) de 2014, que lógicamente han aumentado. Esto significa que de los 200.000 desplazamientos que hacen los ciudadanos cada día, un 56% se cubre en vehículos a motor y menos de la mitad (44%) mediante modos sostenibles: en autobús, a pie, en bici...

No es precisamente Cáceres una ciudad con niveles de contaminación importantes, al contrario, disfruta de uno de los aires más limpios del país, pero la tendencia a usar combustibles fósiles debe revertirse y durante la última década se han aplicado medidas. En 2023 llegará la más importante. Se trata de la creación de una Zona de Bajas Emisiones (el ejemplo más conocido es ‘Madrid Central’), que la nueva Ley de Cambio Climático obligará a poner en marcha en los 149 municipios españoles de más de 50.000 habitantes. El tope se establece en diciembre de 2023.

Serán áreas delimitadas en las distintas ciudades, que restringirán la entrada de vehículos a fin de reducir las emisiones contaminantes. Cáceres ya está trazando un mapa con las zonas del centro que ha acotado al tráfico en los últimos años y con las nuevas a punto de hacerlo. Pero de momento no entra en el guión la prohibición de acceso a estos espacios de los vehículos más contaminantes.

El concejal de Fomento e Infraestructuras, Andrés Licerán, avanza las medidas en trámites. La última restricción de una veintena de calles (solo faltan las cámaras) se completará con áreas de tráfico más calmado en avenida de España y San Blas; la creación de aparcamientos disuasorios en Nuevo Cáceres, Maltravieso, San Blas y Parque del Príncipe; varios carriles bici; y caminos escolares que permitan ir a clase a pie de forma segura.

«Los cambios deben ser pensados y pausados, ofreciendo alterativas», subraya Licerán. Lo que parece claro es que no habrá medidas más rigurosas que las ya iniciadas. Una ciudad cuya orografía reduce el centro prácticamente a dos calles que atraviesan su médula, como Cánovas y Virgen de Guadalupe, con tres transversales básicas, que son Gil Cordero, Primo de Rivera y Virgen de la Montaña, no puede coquetear con más cierres. De hecho, la restricción de San Antón-Parras, junto a la supresión de un carril al final de Cánovas, dejará Hernán Cortés como única alternativa rápida norte-sur por el centro.

El ayuntamiento ha recibido 2,2 millones del Programa de Zona de Bajas Emisiones (Ministerio de Movilidad) para tres de estos proyectos: templado del tráfico al final de Cánovas y carriles bici a las Capellanías y al campus. Ahora opta a otra ayuda similar destinada a financiar cámaras de control de accesos, medidores de calidad del aire y sistemas de movilidad inteligente (por ejemplo semáforos que se autorregulan) en dichas áreas. 

A continuación se detallan todas las áreas, infraestructuras y actuaciones que formarán parte de la futura Zona de Bajas Emisiones de Cáceres.

1. Una veintena de calles se suman al blindaje

La capital cacereña vive durante los últimos años su mayor avance en peatonalización desde el cierre de la Ciudad Monumental en 2003. Todo ello facilita que, a un año de implantar la Zona de Bajas Emisiones, ya estén prácticamente restringidos al tráfico los espacios que formarán parte de esa área, que no obstante se refuerzan con nuevos proyectos.

Así, por un lado se encuentra lista la zona de los obispos anexa a Cánovas, completada hace un año con la peatonalización de Gómez Becerra y la semipeatonalización de Viena. En estos casos, como en el resto de las calles que se mencionarán a continuación, solo se permite la entrada a residentes, servicios públicos, y carga y descarga.

Actualmente se tramita el mayor ‘paquete’ de vías que se someterán a un cierre similar y que además enlazarán la parte antigua, blindada desde 2003, con el área de los obispos, formando así el grueso de la Zona de Bajas Emisiones de Cáceres. Se trata de la restricción de San Ildefonso, que supondrá el cierre de todo el itinerario de Santa Clara, Soledad, Gallegos, San Juan, Pizarro, Fuente Nueva y otras calles señeras del casco viejo. También se procede de igual modo en el eje San Antón-Parras y Clavellinas.

En todas estas vías, un total de 23, el cierre ya es efectivo desde hace meses, cuando se ubicaron las señales pertinentes. Pero falta el elemento más importante para que sea definitivamente respetado: la instalación de cámaras de control. Antes se necesita modificar la ordenanza que regula los accesos restringidos, y solo resta resolver las alegaciones. Precisamente, a raíz de estas alegaciones se suavizará temporalmente la reducción de aparcamientos en el casco histórico proyectada por el ayuntamiento para poner orden en esas calles, hasta que existan alternativas. «Estamos trabajando en el aparcamiento del solar de Iberdrola y buscamos más soluciones en el entorno intramuros», indica Licerán, que espera llevar definitivamente la ordenanza al pleno de octubre.

Además, en medio de todas estas zonas se hará un calmado de tráfico en el último tramo de Cánovas, entre la Fuente Luminosa y San Antón (270.000 €), reduciendo los dos carriles a uno, limitando aparcamientos y ampliando la zona peatonal del parque. «La redacción del proyecto está en licitación», indica Licerán.

Todo ello facilitará el tránsito peatonal de San Blas a Cánovas, ya que Gran Vía también se ha convertido en plataforma única y San Blas se someterá a una actuación de 165.000 euros para reducir bordillos, reformar pavimentos y rebajar todos los pasos de cebra. Otros 108.000 euros harán peatonal (plataforma única) la franja desde la parte final de San Blas hasta las calles Sande y Peñas. Antes de fin de año se conocerá el proyecto definitivo.

2. Ya en proyecto cinco parkings disuasorios

El ayuntamiento ya tiene en marcha los trámites para construir varios aparcamientos disuasorios en el anillo en torno al centro, a fin de compensar las restricciones de la Zona de Bajas Emisiones. «Aunque sea una medida necesaria por la emergencia climática, hay que ofrecer alternativas para evitar cambios traumáticos», subraya Licerán. Así, la Junta de Extremadura ha concedido 1,3 millones para dos de estos parkings. Uno de ellos estará entre la avenida Pierre de Coubertain y la ronda de la Pizarra (en una parcela en superficie junto a Cocemfe). El otro consistirá en la ampliación del ubicado en el parque del Príncipe.

También han comenzado las obras del aparcamiento disuasorio de la explanada de San Blas, situada entre el cementerio y la avenida de Las Delicias. Tendrá una superficie de 2.500 metros cuadrados distribuidos en 54 nuevos estacionamientos para coches, 11 para motos y 3 plazas de movilidad reducida. El proyecto fue adjudicado a la empresa Construcciones Hidráulicas y Viales por 75.353 euros (cofinanciados con fondos Next Generation) y tres meses de plazo.

Las obras del aparcamiento de San Blas acaban de dar comienzo. EL PERIÓDICO

Además, el ayuntamiento avanza en los trámites para crear un parking disuasorio en el solar de Iberdrola junto a la Rivera del Marco, a fin de acceder directamente al casco histórico.

Finalmente, hay ya fondos para la adecuación de un parking disuasorio inteligente junto a la Cueva de Maltravieso, dentro de un convenio para impulsar el modelo turístico entre el ayuntamiento y la Junta, que lo financia con 4 millones de euros.  

3. Cuatro carriles bicis más como alternativa

La creación de Zonas de Bajas Emisiones en las ciudades lleva aparejada la dotación de carriles bici para favorecer desplazamientos más limpios. Cáceres ya ha puesto las bases para construir cuatro nuevos.

El ayuntamiento acaba de sacar a licitación la redacción del proyecto y la dirección de obras del carril bici que unirá la Ronda Norte con el polígono Las Capellanías, que además llevará aparejada una plataforma peatonal. El plazo de ejecución es de dos meses con una inversión de 1,3 millones procedentes de los fondos Next Generation.

Asimismo, la Diputación de Cáceres y la Junta firmarán próximamente un convenio que permitirá financiar la creación de otro carril bici y una senda peatonal entre Cáceres y Casar de Cáceres, en paralelo a la vía CC-38, por 2,4 millones.

La Junta de Extremadura también acaba de confirmar que acondicionará un trazado de 1,54 kilómetros de longitud, para unir la ronda Vadillo con el IES Universidad Laboral y con el campus universitario, a través del denominado Camino de los Carboneros, conectando a la vez con las rondas Norte y Sureste. La obra consistirá en un acerado peatonal y un carril bici, con un coste de 820.000 euros.

Por último se contemplan dos carriles bici en la ronda de la Pizarra y avenida de la Hispanidad con un presupuesto de 400.000 euros cada uno, ambos en licitación, que forman parte de los compromisos exigidos por Podemos al PSOE para aprobar los presupuestos 2022.

4. Itinerarios más seguros para llegar al cole a pie

Los caminos escolares, que ya funcionan en distintas ciudades, son itinerarios prefijados y marcados para que la población infantil pueda utilizarlos en el trayecto de ida y vuelta al centro educativo (a pie, en monopatín, en bicicleta...) con seguridad y autonomía, lo que permite recuperar estos hábitos frente a los traslados en coche.

Cáceres también quiere sumarse a la tendencia y lo hará a través de otra medida de movilidad planteada por Podemos y asumida por el PSOE, dentro de sus acuerdos de coalición. Así, se impulsará un primer proyecto piloto que garantice espacios seguros alrededor de los colegios cacereños, de manera que más familias se animen a acudir a pie o a dejar a los niños en una zona próxima. «Al eliminar automóviles aparcados en doble fila o atascados a la puerta de los colegios, se favorece la movilidad en la ciudad, pero sobre todo se incrementa la seguridad de los pequeños y sus acompañantes», afirman en Podemos.

El ayuntamiento ya ha iniciado el estudio ‘Al cole’ para obtener un diagnóstico de los hábitos de movilidad a través de encuestas. Se trata del primer paso hacia la creación de estos caminos. 

5. Un bus más asequible y una red de senderos

Los cacereños solo realizan tres de cada diez desplazamientos a pie por la ciudad. En el caso del autobús urbano, las estadísticas incluso empeoran: solo se utiliza para uno de cada diez traslados. El resto se hace en vehículos a motor. El camino hacia una ciudad con menos emisiones pasa por fomentar estos medios de locomoción, de ahí que, entre las medidas pactadas por Podemos dentro de su estrategia de movilidad sostenible, se incluyan algunas destinadas a este fin, ya en marcha.

Una de ellas es la creación de la ‘Red de Caminos entre el Paseo Alto y Montesol’. El Ayuntamiento de Cáceres sacó a final de julio a licitación la redacción de proyecto y asistencia a la dirección de la obra, con un plazo de 4 meses. Su ejecución completa supondrá 210.000 euros a las arcas municipales a fin de tejer unas sendas que permitan salvar la brecha que supone la ladera del Paseo Alto entre el norte y el centro cacereño, que ahora disuade a muchos ciudadanos de subir andando desde el área de Mejostilla.

Panorámica entre Montesol y el Paseo Alto, donde habrá una red de caminos. EL PERIÓDICO

Dentro de estas medidas de movilidad pactadas para aprobar los presupuestos, Podemos y PSOE han sacado adelante la gratuidad del autobús urbano, en principio por seis meses, para los menores de 16 años (ya hay 3.000 usuarios acogidos). Además, desde el 1 de septiembre hasta el 31 de diciembre, el precio del bus tiene una bonificación del 30% para todos (compensada por el Gobierno para afrontar la subida energética). El alcalde ya ha solicitado a Pedro Sánchez que esa medida se haga definitiva. 

6. Bicis eléctricas, normas adaptadas y calles 30

La bicicleta resulta meramente testimonial en Cáceres, con un 0,1% de todos los recorridos que realizan los ciudadanos. La opción de las dos ruedas se sitúa por debajo de otros municipios equiparables en población. Muchos cacereños alegan una cuestión evidente: las continuas pendientes de una ciudad construida por razones defensivas entre cerros, no facilitan precisamente un tránsito apacible a pedales. De ahí que, para favorecer la reducción de emisiones contaminantes, se impulse el uso de la bicicleta eléctrica.

Estos vehículos disponen de un motor eléctrico y pueden alcanzar velocidades de unos 20 kilómetros/hora sin esfuerzo. El concejal responsable de Fomento e Infraestructuras, Andrés Licerán, ha precisado que la nueva dotación se encuentra en fase de redacción de proyecto, a través de una partida de 100.000 euros ya concedida por Interreg España-Portugal. El plazo para ponerse en marcha se extiende hasta diciembre de 2023. En principio se instalarán dos bases.

En 2009 ya se creó un servicio similar que no tuvo buena acogida. Cierto que la situación de la ciudad ha cambiado. Desde 2019 se ha tejido una red de itinerarios para bicicletas, patinetes y demás Vehículos de Movilidad Personal (VMP), con más de treinta calles de uso compartido que incluyen carriles de 30 km/h.

Además, Cáceres ha lanzado una de las primeras ordenanzas del país específica para VMP: deben ir por calzadas y carril bici, y llevar timbre, luces y casco.