La empresa de la mina de Cáceres entierra su plan de yacimiento a cielo abierto

Este anuncio es más un gesto que un hecho práctico porque ese proyecto de mina a cielo abierto se presentó en 2017 y en 2019 se anuló su tramitación. Lo hizo la Junta, en respuesta a alegaciones presentadas, por un defecto de forma en la exposición pública de la tramitación del permiso de investigación que permitió presentar el proyecto a cielo abierto. 

El anunció de este lunes se trata más de clarificar que si la empresa obtiene la autorización para un nuevo permiso de investigación o si activa el permiso de exploración solicitado, el paso siguiente, que es la petición de la concesión de la explotación, será la presentación de un proyecto de mina subterránea, en ningún caso se retomaría la corta.

La retirada del proyecto de mina a cielo abierto no significa nada, salvo que la empresa deja más claras sus intenciones. No iba a salir en el caso de que se presentase de nuevo por su impacto ambiental y porque resultaría mucho más difícil por los partidos mayoritarios en el ayuntamiento justificar un cambio del plan de urbanismo. La mina ha vuelto a tener alguna oportunidad desde el momento que la empresa anunció hace un año que cambiaba a un proyecto de explotación subterránea, justificándolo por el incremento de valor de la tonelada de hidróxido de litio, lo que hace más atractiva la inversión en una mina subterránea, mucho más costoso que una intervención de mina a cielo abierto.

Además con este gesto, la empresa se aviene a lo que desde el gobierno municipal se le está pidiendo desde hace semanas: mayores garantías de que el proyecto de una mina a cielo abierto está enterrado. No hace falta que retire su recurso por la denegación del permiso de investigación, que es lo que se pidió en un primer momento por el alcalde, Luis Salaya. Lo importante es que en el caso de obtenerlo no vuelva a presentar un proyecto de mina a cielo abierto. Y este lunes la empresa ha dejado claro que no lo hará.

La empresa, según informó en el comunicado difundido este lunes, ya le ha comunicado a la Junta que no se llevará a cabo ninguna explotación a cielo abierto como la que se incluía en el proyecto original en un expediente «que quedó cancelado y que, a esta fecha, no tiene valor alguno», según deja claro la empresa en su comunicado. La empresa ha solicitado a la administración que retire cualquier información del proyecto original para «evitar cualquier tipo de confusión, mal interpretación o tergiversación del nuevo proyecto, que se presentará cuando la normativa desde el punto de vista administrativo y procesal lo permita».

Ese momento será cuando la empresa obtenga el permiso de investigación, para lo que necesita una sentencia judicial favorable, o la Junta se pronuncie sobre la autorización de un proyecto de exploración solicitado por la empresa, vía que se activaría en el caso de una resolución judicial desfavorable para la empresa. Esta segunda vía necesitaría de un trámite temporal mayor.

El consejero delegado de ENE, Ramón Jiménez, confió este lunes en poder presentar el proyecto de mina subterránea antes de fin de año. Además adelantó que la empresa está estudiado la posibilidad de presentar el proyecto «a título informativo» y antes del momento procesal que corresponda a su tramitación para que lo vayan conociendo las dos administraciones que deciden (el ayuntamiento y la Junta). Pero eso se hará «siempre y cuando no afectase a los intereses de la empresa» respecto a los futuro permisos mineros en la sierra de la Mosca.

Lo más importante que queda aún por saber del proyecto es dónde se localizaría la entrada a la mina subterránea y la ubicación de la planta industrial que transformaría el mineral en hidróxido de litio. La empresa ha adelantado que se barajan tres opciones, todas están fuera del valle de Valdeflores. Una es al sur del valle, otra es junto a la carretera de Medellín y la tercera en las proximidades de las carreteras de Trujillo y Sierra de Fuentes.

El alcalde, Luis Salaya, calificó este lunes de «buena noticia» el anuncio de la empresa de que retira su proyecto de mina a cielo abierto y achacó esta retirada a un «triunfo de los ciudadanos, quienes durante años, de forma cívica, se han opuesto al único proyecto presentado hasta ahora -el de la mina a cielo abierto ya que de la iniciativa subterránea solo se ha hecho una declaración de intenciones en presentaciones-».

Aclaró que lo que toca ahora es analizar el proyecto de mina subterránea una vez que se presente, un plan que «tendrá que ser enjuiciado y analizado y tendrá que pasar por todo el proceso de estudio de impacto ambiental». El regidor recordó que a partir de la presentación del proyecto «pueden pasar muchas cosas», reiterando lo que viene diciendo en las últimas semanas:que lo importante será lo que se determine en el estudio de impacto ambienta sobre el plan de yacimiento subterráneo.

«Vamos a dormir más tranquilos sabiendo que la empresa ha renunciado ya a la vía del proyecto a cielo abierto», resumió el alcalde en respuesta a los medios de información sobre el anuncio realizado por ENE.

La suya no fue la única valoración. La portavoz del PSOE de Extremadura, Soraya Vega, afirmó este lunes que la renuncia de la empresa promotora a poner en marcha la mina de litio a cielo abierto en Cáceres «es una buena noticia» para la sociedad civil cacereña, según las declaraciones recogidas por la agencia Efe. En la rueda de prensa habitual de los lunes, la portavoz socialista recordó que el presidente de la Junta y secretario general del PSOE extremeño, Guillermo Fernández Vara, siempre defendió que lo que pase con el proyecto minero «será lo que decida Cáceres«.

En este sentido, Soraya Vega señaló que la sociedad cacereña, con su alcalde, Luis Salaya, a la cabeza, ha mostrado desde el primer momento su rechazo al proyecto minero a cielo abierto.

La presidenta del Partido Popular extremeño, María Guardiola, calificó de «fantástica noticia» el anuncio de la promotora de la mina de litio de Cáceres de renunciar al proyecto de cielo abierto. En rueda de prensa, y preguntada por esta cuestión, Guardiola recordó que su formación política siempre expresó su rechazo al proyecto de mina a cielo abierto. Guardiola expuso que una vez que se presente el proyecto de yacimiento subterráneo serán los técnicos de medioambiente los que deberán analizarlo y decidir sobre su viabilidad.

Podemos Extremadura aseguró que el anuncio de la retirada del proyecto de la mina a cielo abierto en Cáceres por parte de la empresa Extremadura New Energies responde «a la presión ciudadana» ante un proyecto de corta que consideró como «una aberración sin sentido».

La coordinadora de la formación, Irene de Miguel, explicó que el gobierno extremeño es «pro-mina» y que «pone alfombras rojas a las empresas mineras de fuera, ya que lo que plantean es lo asumido por estas empresas al ser más económico a la hora de la extracción». Para De Miguel, en declaraciones recogidas por Efe, el proyecto de la mina soterrada le parece, «un proyecto que no es inocuo ya que tiene afecciones graves al medio ambiente», una razón por lo que tampoco le convence. 

El coordinador de Ciudadanos Extremadura, David Salazar, abogó este lunes por «ponerse a trabajar ya para que la riqueza que aporta el litio se convierta en riqueza para la región». Realizó estas afirmaciones en referencia a la retirada del proyecto minero a cielo abierto de Cáceres. El portavoz de Cs recordó que su formación «apoya que la extracción del litio se haga en Extremadura».

La mina a cielo abierto que se presentó inicialmente por Plymouth Minerals (ahora Infinity Lithium) y Sacyr proyectaba en Valdeflores ocuparía una superficie de 26,5 hectáreas y en sus extremos más alejados llegaría a los 450 metros de ancho y 710 de largo. Tendría una extensión parecida a la de 33 campos de fútbol. La corta tendría un fondo de 240 metros en la parte más distante de los bordes, su punto más bajo se situaría en la cota 310, mientras que el contorno estaría entre la cota 445 y la 550. Estaría a unos dos kilómetros del núcleo urbano de Cáceres y ocuparía parte de la sierra de la Mosca. Cuando acabe la vida útil del proyecto de obtención de carbonato de litio -ahora lo que se obtiene es hidróxido-, el hueco no se rellenaría, sino que quedaría como un lago artificial.