RECONOCIMIENTO

Medalla de oro a la solidaridad para la cofradía de los Ramos

La Asociación de Caridad de San Vicente de Paúl le entrega su primera distinción de ámbito nacional

Entrega de la Medalla de Oro de los vicencianos a la Cofradía de los Ramos de Cáceres.

Entrega de la Medalla de Oro de los vicencianos a la Cofradía de los Ramos de Cáceres. / CEDIDA

La Asociación de Caridad de San Vicente de Paúl ha entregado su primera Medalla Nacional de Oro al Mérito de la Caridad Vicenciana a la Cofradía de los Ramos de Cáceres y devotos de la Virgen de la Esperanza. El acto tuvo lugar este sábado en San Juan durante una eucaristía y en pleno novenario a la imagen mariana, cotitular de la hermandad.

Los voluntarios de San Vicente de Paul atienden a unas 160 familias sin recursos en cuatro parroquias de Cáceres: San Juan, San José, San Blas y Espíritu Santo. La colaboración con la hermandad de los Ramos es continua y fructífera, lo que ha movido al colectivo a entregarle esta primera distinción a nivel nacional, de la que los cofrades se sienten profundamente orgullosos. Integrada por un millar de hermanos, Los Ramos fue fundada en 1946 por un grupo de feligreses de San Juan en torno al pasaje evangélico de la ‘Entrada Triunfal de Jesús en Jerusalén’ para procesionar el Domingo de Ramos. De inmediato se acordó extenderla al Miércoles Santo con la procesión de un crucificado que desde 1661 se venera en San Juan. Monseñor Francisco Cavero y Tormo, obispo de Coria, mediante decreto de 18 de marzo de 1946, erigió canónicamente en la parroquia de San Juan Bautista la Cofradía de los Ramos y del Cristo de la Buena Muerte.

El 31 de marzo de 1949 se bendijo la Imagen de la Virgen de la Esperanza, obra del escultor cacereño José García Bravo. En 1996, el Obispado de Coria-Cáceres cedió la imagen del Cristo del Perdón, que procesiona el Martes Santo. En 2003, el Rey Juan Carlos I entró en la cofradía como Hermano Mayor Honorario, siendo desde entonces Real Cofradía.

Distribución de alimentos

Por su parte, la Asociación de Caridad de San Vicente de Paúl lleva largas décadas atendiendo a los ciudadanos con serias carencias. Cada mes, los voluntarios distribuyen productos de primera necesidad a través de dos proyectos. Por un lado, hacen entregas del Banco de Alimentos, la gran ONG que surte a muchas entidades benéficas. Por otro, gestionan un espacio similar a un supermercado (llamado SAC) donde las familias tienen la posibilidad de llenar su despensa con artículos básicos por un precio mucho más asequible.