La reforma de la plaza de Santiago se adjudicará antes de junio

La reforma de la plaza de Santiago se adjudicará antes de junio. El proyecto que empezó a ponerse sobre la mesa hace seis años, encara ya su recta final en lo administrativo para materializarse. Según confirma el colegio de arquitectos de Cáceres (Coade), que ha formado parte de todo el proceso participativo, se mantienen los plazos que estimaron a finales del año pasado y será en la primavera cuando está previsto que se licite la obra.

Por el momento, concretan que el proyecto de ejecución, uno de los últimos pasos, ya ha recibido el visto bueno tanto de arquitectos como de la Diputación de Cáceres, que aporta los fondos para obra y ha gestionado el proyecto y ahora se encuentra a la espera de que los técnicos municipales revisen la documentación para darle el ‘ok’. 

Aunque aún no se han redactado los pliegos de la licitación ni los plazos en los que transcurrirá la obra, sí se conoce que contará con un presupuesto de 600.000 euros que provienen del programa ‘Pueblos con futuro’ de la Diputación de Cáceres. En total, a través de este proyecto, la institución provincial reparte 11 millones para que ayuntamientos inviertan en proyectos en toda la provincia. En un primer momento, iba a financiarse con fondos de otro programa pero finalmente se optó por esta fórmula para no dividir la obra en varias fases. 

Si hay algo que haya caracterizado a este proyecto es que ha sido ejemplo pionero de proceso colaborativo. Fue en 2017 cuando se iniciaron las primeras conversaciones para que se reordenara para frenar su degradación --aumento de la delincuencia-- y para salvar los desniveles y la multitud de barreras arquitectónicas. Será la primera obra que se llevará cabo tras un proceso de escucha a los vecinos para que hagan sus aportaciones y tras un concurso de ideas del que finalmente resultó elegida la propuesta del arquitecto extremeño Antonio Álvarez Cienfuegos-Rubio.  

Así, la reforma de la plaza ubicada en el arrabal cacereño contempla que la plaza se convierta en un espacio más accesible y con más zonas verdes. La propuesta que se plantea es que la iglesia quede rodeada por una bandeja perimetral que haga desaparecer las escaleras y que se complete con hasta cuatro zonas nuevas de arbolado en los laterales de la plaza. 

Otro de los pilares en los que reside el proyecto del arquitecto se encuentra en la necesidad de destacar el protagonismo de la iglesia de Santiago o el Palacio de Godoy, otro de los edificios que iniciará en breve las obras para convertirse en un hotel de lujo. Para ello, propone darles mayor presencia, ya que se encuentran escondidos «entre los recovecos que se forman a su alrededor».