40 años del Estatuto de Autonomía

En estos días se cumplen cuarenta años de la tramitación y aprobación del Estatuto de Autonomía de Extremadura, probablemente el hecho más importante de la vida política extremeña. El 13 de junio de 1978 se publicó el decreto por el que se creaba la Junta Preautonómica, que presidió Ramallo, que incluía la siguiente frase: «Las fuerzas parlamentarias de Extremadura han venido reiteradamente manifestando su aspiración a contar con instituciones propias dentro de la unidad de España...». Esto pone de manifiesto que, mientras en casi toda España se oía el grito de «libertad, amnistía y estatuto de autonomía», por aquí parece que esas inquietudes solo estaban en la mente de los políticos.

A partir de ese momento proliferan las reuniones de los dos grandes partidos, UCD y PSOE, para elaborar y presentar ante las Cortes un proyecto de Estatuto que se consigue en una reunión en Mérida en diciembre de 1981. Tras acordar que se iría por la vía del artículo 143 y no por el 151, habían salvado las grandes discusiones sobre la supresión de las diputaciones, la capitalidad, la representación de cada provincia y el porcentaje de votos para obtener diputados. No obstante la debacle de UCD obligó a suspender las Cortes y adelantar elecciones, con lo que la aprobación del Estatuto se retrasó hasta que en diciembre de ese año se nombra la ponencia (en la que estaban Castellano, Aznar y Martín Villa, entre otros), que publica su informe el 15 de enero de 1983, celebrando la comisión constitucional reunión el día 18. En ella se discute y aprueba el dictamen que pasa al pleno de las Cortes el 25 de enero donde se aprueba con 203 votos favorables, 5 en contra y 93 abstenciones, pasando al Senado donde entra el 31 de enero y se aprueba con 228 a favor, 3 en contra y 72 abstenciones.

El 25 de febrero se transformó en la Ley Orgánica 1/1983. Será bueno recordar que fue rechazado por el bloque antiestatuto cacereñista creado el 5 de febrero. Entre los objetivos que pormenoriza el artículo 6 están: «La mejora de las condiciones de vida, elevación del nivel cultural y trabajo para todos los extremeños». En las elecciones de mayo del 83 se eligieron 35 diputados del PSOE, 20 de AP, 6 de EU y 4 del PCE.