EL APUNTE

Ulises y Hércules se rinden en Cáceres

Hace seis años a alguien se le ocurrió abrir un parque comercial junto a Carrefour. Aún sigue en tramitación

Terrenos que están entre Carrefour y la variante de la N-630 (avenida del Ferrocarril).

Terrenos que están entre Carrefour y la variante de la N-630 (avenida del Ferrocarril). / EL PERIÓDICO

José Luis Bermejo

José Luis Bermejo

Ulises dejó Troya rumbo a Ítaca. Durante el camino se enfrentó a numerosas pruebas, vivió una auténtica odisea hasta reencontrarse con Penélope, mientras que Hércules tuvo que superar doce pruebas, cada una más complicada que la anterior. Pero a mí me da que esos obstáculos serían nimiedades comparados con los que tienen que pasar y superar los alocados aventureros que pretenden abrir un negocio en Cáceres.

Recurro a Homero y a la mitología porque esta semana ha vuelto a ser actualidad una iniciativa empresarial que prácticamente había caído en el olvido, al menos en el mío por puro aburrimiento. Se trata del parque comercial (son naves con distintas actividades terciarias -como lo que hay junto a la ronda norte-) que se proyecta entre el centro comercial Ruta de la Plata y el hipermercado de Carrefour. De nuevo, y no es una novedad, es Demarcación de Carreteras la que plantea objeciones por la necesidad de una mejor adecuación de los accesos al espacio comercial.

No digo yo que Demarcación no tenga razón, pero a lo que no hay derecho y es inconcebible es que esto se está planteando ahora. Cáceres tardó más de un lustro en dotarse de un plan de urbanismo, desde aproximadamente el año 2005 hasta 2010, entonces se distribuyeron los espacios que rodeaban el casco urbano en función de unos usos. El del citado parque comercial se sabía que era para ese fin durante todo el periodo de información del documento, que se expuso al público en al menos tres procesos de exposición. Ahí fue el momento de poner objeciones, no otra vez ahora. Ahí se tuvo que examinar bien el documento del plan de urbanismo. Y si se tenía que haber hecho una vía de servicio para dar accesos a los espacios comerciales y no afectar al tráfico de la variante, era en ese momento cuando se tuvo que exponer y no ahora. En ese instante se tuvo que entrar al detalle porque ya se sabía que en todo ese borde de la variante de la N-630 iban a establecerse negocios y comercios. Si en el nuevo plan estaba muy claro, aparecía hasta con colorines. Bastaba solo con saber leer para darse cuenta de que ahí tarde o temprano habría actividad comercial.  

Es un desatino lo que pasa con este proyecto y con otros en esta ciudad. Demarcación de Carreteras busca que se garantice la seguridad vial y se cumpla la legislación, no lo dudo. Pero es que no se puede esta siempre así. Cuando se ha salvado un trámite surge otro y tras ese trámite aparece otro y al final nada de nada y cualquier iniciativa queda parada eternamente. Lo de Ulises y la odisea es una broma comparado con lo que hay que penar aquí para hacer cualquier actividad. Es una iniciativa que se planteó por primera vez hace seis años. Yno se trata de una megalópolis comercial que cientos de tiendas, que entonces sí podría tener alguna posible explicación esta tardanza. No, son solo cinco o seis naves para actividades terciarias. No es mucho más. Y en seis años aún no se ha movido ni una piedra. Papeles sí, cientos, pero máquinas, ni una.

Si Ulises se hubiese topado con Cáceres en su travesía, para cuando hubiese llegado a Ítaca, a Penélope le habría dado tiempo a morirse y resucitar dos o tres veces. Esperemos, al igual que se hizo con el centro comercial del matadero, que se encuentre una solución y que no se tarde otro sexenio más con estas naves. ¡Vaya odisea!  

Suscríbete para seguir leyendo