Mercedes Expósito acumula días sin salir de su casa. No es por decisión propia sino porque la única forma de hacerlo no se lo permite. Esta cacereña, que reside en el barrio de El Rodeo denuncia a este diario que se encuentra recluida en su domicilio porque no puede hacer uso del ascensor, única opción de moverse entre el segundo piso en el que se encuentra su hogar y la calle.
Expósito tiene movilidad reducida y hace uso de silla de ruedas. Hace vida totalmente independiente y mantiene fija su rutina de salir cada día a realizar sus gestiones o simplemente a dar un paseo. Desde el jueves no ha podido hacerlo puesto que una avería en el ascensor de su edificio la ha dejado incomunicada con el exterior. «Llevo encerrada en casa una semana», lamenta.
En ese sentido, asegura que ya se ha producido esta situación en ocasiones anteriores pero el arreglo solo se ha prolongado durante unas horas. Eneste caso, tras ponerse en contacto con la comunidad de vecinos, le han manifestado que la avería en el mejor de los escenarios no se solucionará hasta este jueves. «A veces se estropea y vienen al rato, aquí hay que esperar», me dicen.
Critica que no le han ofrecido otra alternativa y que no tiene otra opción para salir puesto que las viviendas de sus familiares no están adaptadas. En esa línea, lamenta la situación de «ansiedad» que le provoca no tener la libertad de moverse con autonomía y pide que se agilice el arreglo de la avería.