BELLO ANUNCIA UN PRINCIPIO DE ACUERDO CON EL COLECTIVO DE PROPIETARIOS

El polígono ganadero de Cáceres se ordenará tras cuarenta años

Es, junto a Charca Musia, una de las asignaturas pendientes del urbanismo local

Un caballo en una de las calles del polígono.

Un caballo en una de las calles del polígono. / Lorenzo Cordero

José Luis Bermejo

José Luis Bermejo

Se llama y se le conoce como polígono ganadero. Pero es más bien un cóctel de diversos usos urbanístico en el que junto a viviendas hay parcelas con animales y naves con empresas. Su ordenación, lo mismo que la de la Charca Musia, es una asignatura pendiente de las últimas corporaciones. Este lunes, el concejal de Urbanismo, José Ramón Bello, anunció que hay un principio de acuerdo con la cooperativa que agrupa a los propietarios de terrenos en el polígono ganadero para afrontar su ordenación. Y recordó que desde 1980 estaba pendiente de solución.

Bello recordó que el Plan General Municipal de urbanismo en vigor desde 2010 establece que la iniciativa del planeamiento para intervenir en la ordenación del polígono es pública y que esto lo hacía prácticamente inviable por la dificultad que tiene el consistorio para disponer de la financiación suficiente, aunque luego se repercutiese el coste entre los propietarios. El acuerdo al que se ha llegado con la sociedad cooperativa es que presentarán una plan especial con las condiciones generales de la ordenación (viales, parcelas, redes de servicio...) y las cesiones al ayuntamiento, durante la tramitación del mismo se pedirán los informes sectoriales. Una vez aprobado se entregará por parte de la cooperativa un proyecto de reparcelación con la asignación a cada titular del suelo que le corresponde dentro del polígono y las cargas, en base a la propiedad de cada uno, a las que tienen que hacer frente para la urbanización del polígono. El paso siguiente será la presentación del proyecto de urbanización, que se sufragaría entre los propietarios. El ayuntamiento se comprometería por este acuerdo a tramitar cada paso «con la máxima diligencia y a no introducir modificaciones» que dificulten la tramitación, precisó Bello.

El plan de urbanismo establece que este polígono tendrá que tener usos industriales y agropecuarios, además regula que se tendrá que mejorar la infraestructura viaria y también la urbanización y el acondicionamiento de los usos, con el mantenimiento, «en lo posible», de la trama viaria existente. También se tendrá que «impedir la expansión de actuaciones incontroladas».

Cuando el plan especial esté en exposición pública se pedirá el informe de Carreteras, ya que el estudio informativo de la prolongación de la autovía A-58 llegó a contemplar entre sus alternativas un trazado por el polígono.