HAN PARTICIPADO PROFESIONALES DE AUTÉNTICAS CUNAS DEL GREMIO COMO RIOLOBOS O MALPARTIDA DE PLASENCIA

La albañilería, arte en Cánovas

Quince cuadrillas compiten en el concurso más antiguo del país en este gremio. Los mejores arcos girados han sido obra de los participantes de San Vicente de Alcántara

Cánovas se ha convertido este sábado en la fiesta de la albañilería. Profesionales de calidad reconocida, auténticos artistas del oficio, se han dado cita en el corazón de Cáceres para competir en el Concurso de Albañilería ‘Cáceres Patrimonio de la Humanidad’, el más antiguo de España, que organiza la Federación de Empresarios de la Construcción (Fecons) con la colaboración del Ayuntamiento de Cáceres. Allí estaban las 15 cuadrillas participantes, procedentes de municipios que son auténticas cunas de buenos trabajadores del gremio: Riolobos, Trujillo, Malpartida de Plasencia, Don Benito, Acehúche, La Serena, Madroñera, San Vicente de Alcántara, Santa Amalia, Llerena, Sevilla y la propia capital cacereña.

Juan Manuel Antúnez y Gabriel Morato, de San Vicente de Alcántara, se han llevado el primer premio, entregado por el  Colegio Oficial de Arquitectos Técnicos y Aparejadores (COAAT) de Cáceres. Fueron los que mejor resolvieron el proyecto propuesto por el arquitecto José Javier Sánchez, basado en una pieza constructiva especialmente representativa de Cáceres, el arco, pero con una evidente complicación: había que reproducir cuatro arcos girados 45 grados para crear una bóveda virtual. «La dificultad está en el replanteo inicial, que debe realizarse bien para que coincidan las medidas, y a partir de ahí comenzar la ejecución», explicó el propio arquitecto. Se les amplió una hora más a fin de que pudieran acabar los trabajos.

Los ganadores, Juan Manuel Antúnez y Gabriel Morato, de San Vicente de Alcántara.

Los ganadores, Juan Manuel Antúnez y Gabriel Morato, de San Vicente de Alcántara. / SERGIO VELA

Juan Manuel, de 55 años, confiesa que ya ha ganado más de veinte concursos. Lleva toda su vida dedicado a la albañilería, «desde que salí del colegio», pese a que sus padres trabajaban el corcho. Gabriel, de 63 años, comenzó en la profesión a los 16 años también por vocación. «No tenía familia en el oficio pero me llamó la atención desde pequeño y hoy tengo una pequeña empresa de reformas», revela.

Mucho trabajo

Los dos explican que, tras una etapa difícil por la inflación, ahora hay bastante trabajo, «pero no tenemos relevo», reconoce Gabriel. Efectivamente, Fecons ha puesto de manifiesto la urgente necesidad de mano de obra. De ahí la importancia de estos concursos, y especialmente de premios como el que han recibido este domingo Joaquín Crespo y Aarón Ventero como mejor cuadrilla menor de 30 años, ambos alumnos de la Fundación Laboral de la Construcción.

Joaquín Crespo y Aarón Ventero, mejor cuadrilla menor de 30 años.

Joaquín Crespo y Aarón Ventero, mejor cuadrilla menor de 30 años. / SERGIO VELA

El tercer puesto ha quedado desierto y el segundo (1.500 euros) lo han ocupado Manuel Arias y Juan Manuel Forero, procedentes de Sevilla. Las cuadrillas han estado arropadas por numeroso público que ha seguido atento sus evoluciones.